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Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Atardecer en Colombier.
https://fotos.subefotos.com/4834edb7...e8e034950o.jpg Playa des Flamands. https://fotos.subefotos.com/de8dd9b9...d9616f452o.jpg Deshaies (NW de Guadalupe). https://fotos.subefotos.com/a56802dd...d9053c363o.jpg Arco iris a la salida de Deshaies. https://fotos.subefotos.com/3504d1df...8fa10b369o.jpg Fondeo en Malendure (al fondo, Îlets Pigeon; Reserva Cousteau). https://fotos.subefotos.com/ae9a1461...425b497c3o.jpg Aguacero en Malendure (con vientos repentinos de 30/40 nk). https://fotos.subefotos.com/aff0450e...5cd8e63c4o.jpg Pelícanos en Marina Rivière-Sens. https://fotos.subefotos.com/d05532e6...7496bb559o.jpg Playa de Rivière-Sens. https://fotos.subefotos.com/d14bf440...4c1165ad7o.jpg El fondeo desde el Point Bleu Soleil. https://fotos.subefotos.com/6e820458...7059f98f9o.jpg Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
25 mn separan Rivière-Sens de Pointe-à-Pitre. Una navegación costera: de
cabo en cabo. Dos millas al sur, teníamos la Pointe deu Vieux Fort. Nada más doblarla, tendríamos que poner un rumbo de marcado componente este, para ir rebasando Pointe Launay, Pointe Violon, Pointe a la Taste y Pointe de la Caspeterre. Desde allí, ya con rumbo norte, hacer las últimas 10 millas, con destino a la Marina Bas-du-Fort. Una travesía tranquila, con la salvedad de que nos enganchamos en uno de los palangres que hay frente Goyave, lo que nos hizo detenernos y tener que bucear un momento, para desenredar el cabo de la hélice. Esta vez no entraríamos a puerto. En la amplia bahía de Pointe-à-Pitre, hay dos posibilidades de fondeo. Una al W, protegidos por el islote de Cochons y otra al norte, al resguardo de Pointe Fouillole. Por cercanía a la marina, ya que a diario iríamos en el anexo, decidimos echar el ancla en el segundo. Durante la travesía, Diego me había comentado la posibilidad de no hacer la travesía desde Martinica hasta Venezuela, pues no las llevaba muy bien. Y ciertamente, tras la última desde San Bart a Deshaies, yo también albergaba mis dudas. Ante esta nueva situación y en vista de que llevar solo el cata hasta Venezuela, no me parecía la mejor idea (la maniobra no está pensada para la navegación en solitario), le puse un correo electrónico a mi amigo Manel (cofrade El Rezón de esta Taberna), para comentarle lo expuesto y proponerle si le enviaba un billete de avión y que se viniese. Estábamos en la primera quincena de Marzo, por lo que podría llegar antes de Abril y navegar un mes por el Caribe. Pero sus circunstancias personales no se lo permitían, así que me vi sin tripulación para retornar a Venezuela. En conversaciones que había mantenido con Manolo (iMystic), habíamos hablado de los respectivos planes de cada uno, en relación con nuestra estancia en el Caribe. Y nuestras ideas eran muy similares. Navegar otro año mas (2017) y volvernos o vender el barco allí mismo. Yo me inclinaba más por esta última, ya que mi intención, a la vista de que las personas de confianza, con las que yo suelo navegar, no iban a venir abordo en mucho tiempo, era bajar de eslora, para navegar en solitario o a lo sumo, con mi pareja. Con poca esperanza, una vez que Manolo me respondió negativamente, le puse un correo a mi amigo Ariel Rubira, un bróker de Mazagón, con el que ya había hecho los trámites para que me publicitase la venta del barco, de cara a que moviese el asunto. Realmente, ya estaba en el mercado, pero a un precio elevado. Y ese paso no era en vano, pues siempre habría alguien a la espera de que se le bajase el precio, para hacer una oferta. Mientras tanto, pensando en que los interesados, de haberlos, tardarían un tiempo en aparecer, seguíamos con nuestra rutina. En la Marina Bas du Fort, hay varios locales donde poder tomar copas y ver los partidos de Champions League. Los día que juega el PSG, no hay una mesa libre. Hay que andar presto y no dormir la siesta, si quieres pillar un sitio libre. Por la diferencia horaria, los partidos son a las 14:45'. Una hora estupenda para verlos con un mojito o un "cubata". También hay un buen supermercado, con el que llenar la despensa. Y aprovechamos para hacer combustible, que aunque se gasta poco, me gusta llevar el tanque lo más lleno posible. Visitamos con la neumática, la Rivière Salée. Un canal entre manglares, que separa las islas Grande-Terre, de Basse-Terre; las dos alas de la mariposa. Entre los canales, se vislumbraban posibles rincones, aptos para resguardarse de la llegada de un huracán. Pero soy de la opinión, que es preferible que no te pille allí ninguno. Mejor estar de vuelta en Europa o haber bajado a Venezuela, Trinidad, Colombia, Panamá .... incluso Granada. El citado canal, desemboca en el Gran Cul-de-Sac Marin (Basse Terre), un nombre casi similar al de Martinica. Se ve que no se calientan mucho la cabeza. Al llegar al final del canal, el mar se abre y te parece inmenso, pero apenas si navegan barcos por la zona, ya que está plagada de bajos y tampoco se ven lugares protegidos para el fondeo. Nuestro siguiente destino, siguiendo la costa hacia el este, sería Le Gosier, cuyo fondeo está protegido por un islote del mismo nombre, rodeado de un arrecife de coral. Un lugar bueno para bañarse. El pueblo no tiene mucho donde abastecerse, pero no falta la panadería. Incluso para el acceso a internet, en correos te dan una clave que vale solo durante 24 horas y su wifi no alcanza mucho más allá del poyete de la puerta. Continuando hacia levante, a seis millas está el Anse de Ste-Anne. Una barrera coralina, protege la bahía, en la que hay multitud de bajos. En el puerto de pesca, se puede dejar el dingui, para luego recorrer el paseo y la playa, que se extienden más de un kilómetro. El bullicio me recordaba nuestros pueblos costeros en verano. Y desde aquí, abandonaríamos Grande-Terre, para navegar hasta María Galante. Continuará ..... Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Hay que ser muy precavido a la hora de salir del Anse de Ste-Anne, pues
la barrera de coral que lo cierra, no vela en su totalidad. Afortunadamente, el canal principal está balizado con un par de boyas rojas, que hay que seguir con rigor, a no ser de que se quiera acabar encima de alguna roca. Una vez libre de bajos, ponemos rumbo sur, para cruzar las 17 mn que nos separan de la Pointe de Folle Anse. El viento del través nos lleva en volandas. A continuación de la punta, en dirección sur, se encuentran Anse La Frais y Ansa Ballet, que termina en Point Ballet. A simple vista, se podría considerar un solo fondeo, muy aplacerado, de más de cuatro kilómetros. La mar está más serena en la zona norte, por lo que es donde me gusta largar el ancla. Además, en la parte sur, a la altura de Anse Ballet hay una planta de azúcar y cuando queman la caña, las cenizas vuelan en dirección oeste, por lo que pueden caerte sobre la cubierta. Las dos principales ciudades de la isla, son Grand-Bourg en al SW y Saint Louis al NW. La primera, está a menos de milla y media de la punta sur del fondeo y la segunda, a una milla desde la Pointe de Folle Anse, extremo norte del mismo. A las dos se puede ir perfectamente con la auxiliar, se esté donde se esté fondeado. A lo sumo, no serán mucho más de tres millas las que hay que cubrir, pero la mar estará como un plato. Aquí es donde se le da valor a tener un motor potente y un anexo semirrígido, que sea capaz de deslizar y navegar a más de 12 nk. Es muy habitual en el Caribe, fondeos enormes, con varias millas de una punta a otra. Y también, como en este caso, que estés en un punto solitario y para abastecerte tengas que ir a otro lugar, que igual está a 4 ó 5 mn. O incluso tener puntos de interés para bucear, a distancias similares y que no sea recomendable acercarse con el barco. Por esto, se hace muy necesario, para los que tengan intención de practicar este tipo de viajes, que se provean de una auxiliar semirrigida, de una eslora a partir 2'70 metros, con una motorización de 8cv en adelante. Y por supuesto de hypalon/neopreno, ya que el sol tropical castiga fuertemente el material. María Galante es una isla poco visitada por los que navegan el Caribe. Al estar hacia el oeste, la saca de la ruta de los que suben y bajan entre Guadalupe y Dominica, por la costa de sotavento de las islas. Todo lo contrario que Los Santos, que pilla justo de paso. Por tanto, el turismo no es una de las principales fuentes de ingreso de la isla, como si lo son la caña de azúcar y la pesca. Aquí podremos degustar los mejores rones franceses, ya que hay varias destilerías. Otra de las cosas por las que me gusta fondear en Anse La Frais, es por la buena pesca que hay para el trasmallo. Suele entrar el pez sapo o similares, con una carne blanca exquisita. Ideales para hacer sopa o arroz a banda. En el Grand-Bourg, la capital, se puede hacer la entrada y/o la salida. Saint Louis, la segunda ciudad en importancia de la isla, suele estar muy animada durante el día, por la visitas que le llegan desde la propia Guadalupe. Son dos paseos recomendables, que te pueden tener entretenido durante el día. Desde María Galante, nos dirigiríamos hacia el oeste, para ir a Los Santos, el pequeño archipiélago que hay al SW de Guadalupe. La noche antes de zarpar, el viento había rolado a SE, al tiempo que en la azucarera quemaban la caña; nos encontramos la cubierta con un manto de ceniza, que nos hizo estar baldeando al menos una hora, pues no era muy conveniente pisar sobre ella, so pena de que el barco terminase pareciendo una carbonería. :cunao: Terminada la faena, el viento en popa nos acercó a Anse du Bourg, en Terre-de-Haut (Los Santos). Poco más de 15 mn, que nos sirvieron para disfrutar de la navegación unas horas. A la llegada, la misión era encontrar una boya libre. Nuestra idea era llegar un poco antes, pero el baldeo extra de la cubierta, nos había retrasado un poco. Aún así, sobre la marcha dimos con un punto al que amarrarnos. Como el año antes, la ciudad era un hervidero. Distintos ferrys llevan a diario multitud de turistas desde Guadalupe, por lo que en la plaza del muelle, la gente se apiña. En los alrededores hay una gran variedad de establecimientos, para cubrir cualquier necesidad, incluida la del WIFI. Y por supuesto, no pueden faltar las panaderías.... mi perdición. Como quiera que no miraba el correo electrónico desde que salimos de Pointe à Pitre, decidí echarle una ojeada, para ver como estaban las cosas. Y mi sorpresa fue mayúscula, pues el amigo Ariel, me había enviado un mensaje indicándome que había personas interesadas en el barco. Los siguientes días, nos dedicamos a visitar la isla. Llevé a Diego a visitar el Castillo de Napoleón (algo ineludible si se viene a esta isla) y otros puntos de interés. Mientras tanto, seguía cruzándome e-mails con el bróker, para ver si se concretaba ese interés y salía alguna oferta. Dos o tres días después, los interesados se mostraron firmes y llegaron dos ofertas satisfactorias. Así que nos emplazamos para que viniesen a ver el barco. Mi intención era que lo hiciesen en Pointe à Pitre, ya que me pillaba cerca y de no llegar a cerrarse la operación, yo podría continuar mi camino hacia Martinica. Pero como los clientes eran estadounidenses, pretendían ver el barco en las Islas Vírgenes. Algo improbable para mi, ya que suponía navegar muchas millas hacia el NW y si la cosa no cuajaba, tener que desandar el camino. Al final, como término medio, quedamos en San Martin, que aunque a mi no me hacía gracia, era la única posibilidad que había para poder iniciar las negociaciones. Cuando el primer cliente depositó la cantidad que cubriría los gastos del traslado, pusimos rumbo de vuelta a San Martin. Ese depósito, al menos nos daba la garantía de que estaban interesados en comprar y que no haríamos el viaje en balde. Así que tras cinco días en Los Santos, pusimos de nuevo rumbo a Marigot. Ciento sesenta y cinco millas náuticas nos esperaban. Continuará ..... Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Durante la tarde, había estudiado la mejor derrota, respecto de la previsión
meteorológica que tendríamos. Una posibilidad era navegar hasta Monserrat, pasándola por sotavento y tras rebasarla, virar a estribor, para navegar por el barlovento de San Critóbal y Nieves. La otra posibilidad, consistía en poner rumbo directo al W de San Eustaquio, navegar paralelo a su costa hasta llegar a la latitud 17º 30' y de ahí, a Punta de Cannonier, el lugar más occidental de San Martin. Como quiera que la noche, previsiblemente, nos iba a pillar a partir de Monserrat, decidí hacer la segunda de las rutas, que si bien tenía milla y media más, todo el tiempo navegaríamos a sotavento de las islas, a una distancia suficiente, como para que el efecto "sombra" no influyese demasiado. Con las cosas claras, tras el desayuno, no hubo más que soltar la boya y ponerse a navegar. El primer tramo, desde Los Santos hasta la Pointe du Vieux-Fort, en el SW de Guadalupe, fue magnífico. Fuerza 5,mayor y génova, poca mar, viento de aleta ... y El Temido lll pasando de 9 nk. Pero éramos conscientes de que esa felicidad iba a durar poco, pues nada más doblar el cabo y virar hacia el norte, entraríamos en la zona de influencia de la isla, que con su altura, nos dejaría sin viento. Como nuestro rumbo era divergente a la costa, se planteaba la cuestión de en que momento, se perdería su efecto y aparecería la brisa. Así que, resignados, pusimos un motor en marcha, enrollamos el génova, dejando desplegada la mayor (aunque los catas, a diferencia de los monocascos, navegan perfectamente a motor con ésta en su bolsa). Con la mar como un plato y sin una gota de viento, fuimos haciendo millas, al tiempo que nos alejábamos, poco a poco, de la costa guadalupeña. En la distancia, hacíamos un ejercicio de agudeza visual, intentado poner nombre a las poblaciones de la costa: "aquello es Melendure", "eso otro Deshaies" ... cualquier cosa, para ir pasando el tiempo. Una eternidad se nos hizo, las poco más de cuatro horas que fuimos a motor. Tras el almuerzo, con Guadalupe casi fuera del alcance de nuestra vista y al borde de la desesperación, se empiezan a vislumbrar en lontananza, blancos garabatos sobre el azul de la mar, que a medida que avanzamos, se le van aclarando los trazos. Y de repente, nada más posarse la proa del Temido lll en las nuevas y movidas aguas, pasamos de la calma al fresco, como si un muro invisible, hubiera estado ocultando el viento. De inmediato, el barco navegaba a 9/10 nk, dejando dos blancas estelas, en las que el murmullo del agua, nos sonaba a música celestial. A lo lejos, divisábamos Monserrat; nuestra derrota nos llevaba a unas 3mn de sus costas, pero al tratarse de una isla pequeña, nuestra esperanza era que no amortiguase tanto el efecto del viento y nos permitiese navegar a vela durante horas. Con el miedo en el cuerpo, no dejábamos de avanzar, cruzando los dedos para que Eolo no nos abandonase. Y puede que oyese nuestras súplicas, porque a lo largo de toda la noche, aunque menguando su fuerza, no cejó en el empeño. En la oscuridad de la noche, solo el brillo de las luces, nos hacía intuir donde estaban tanto Charlestown (Nieves), como Basseterre (San Cristóbal). Antes del amanecer, estábamos a la altura de San Eustaquio. Las potentes luces de su puerto comercial, donde decenas de mercantes, dedicados al transporte de crudo, esperaban su turno para hacer su carga/descarga, me recordó la entrada a la ría del Odiel, donde Mazagón, vigila impertérrito la barra. A partir de ahí, solo faltaban 40 mn hasta Marigot y amanecía .... La bahía de Marigot, seguía tan concurrida como la dejamos. Buscamos un hueco entre la multitud de barcos, volviendo al punto donde habíamos fondeado la vez anterior. Le Beach Hôtel tenía un WIFI lo suficientemente potente, como para que en algunas ocasiones, fuese capaz de conectarme a él. Así que esta vez, intentamos arrimarnos lo más posible a tierra, a fin de tener más posibilidades. El amigo Gabi y Svetlana, estaban el Las Islas Vírgenes, haciendo un chárter. Al igual que Ignacio, que lo habían contratado de cocinero en un lujoso yate. En el Geminja, estaban Manuel y Nuria. Además del resto de amigos que habíamos conocido en nuestra estancia anterior, especialmente una pareja argentina: Fran y Concha. Ahora daban comienzo unos días un poco caóticos. Donde los correos de ida y vuelta, con el típico tira y afloja de las partes, darían la impresión de hacerse eternos. Además, había que añadirle la dificultad extra, de que yo me comunicaba con mi agente en Mazagón (Huelva), éste con el agente del comprador, que estaba en los EEUU. Y por último, el bróker yanqui con su cliente, lo que hacía que las ofertas y contra-ofertas, el quito esto y pongo aquello, no obtuviesen respuestas inmediatas. Pero bueno, solo era 21 de Marzo y la temporada de huracanes no llega hasta primeros de Junio. Tiempo teníamos de sobra para las negociaciones. Cuando hicimos la entrada, ese 21 de Marzo, me resultó familiar la persona que me atendió en el Island Water World (la tienda de repuestos náuticos junto al Geminja). Empecé a darle vueltas a la cabeza, para saber de que me resultaba tan familiar. Hasta que de pronto, caí en la razón. Resulta que pocos días antes de marcharnos la vez anterior, fuimos al Super U para hacer un compra importante. Llenamos dos carros y para transportar la compra hasta el dingui, lo que se me ocurrió fue llevarlos con los mismos dos carros del super. Y una vez vaciados en la auxiliar, Diego se quedaría en ella, guardando lo comprado y yo llevaría los carros vacíos de vuelta a su sitio. Y estando en la tarea de hacer los 800 metros que separaban el super del embarcadero, un matrimonio paró delante nuestra con su "pick up", para que trasvasásemos la mercancía de los carros al coche y ellos acercarnos al embarcadero. Por suerte, estábamos aún en la misma puerta del super. Ella era la que iba conduciendo. También coincidimos esos días, con Susana e Ignacio, los tripulantes del Vitamina, el Lagoon 42 que nos cruzamos entrando a Virgin Gorda por el paso del norte. Estaban poniendo a punto el barco, para continuar su viaje hacia Granada, donde dejarían el cata en la temporada de huracanes. Tras varios días cruzándonos e-mail's, por fin se decidió el primero de los interesados a girarnos una visita. Vendría acompañado de un "surveyor", que le emitiría un informe sobre le estado del barco. Por mi parte yo estaba tranquilo, pues todo estaba correcto. Y los interiores, relucían más que si fuesen nuevos. Diego, dejó la sentina del casco de babor, que se podía comer en ella. Así que la mañana que vinieron al barco, quedamos en la gasolinera que hay en el canal de entrada a la laguna. Nada más subir a bordo, el comprador miró al perito, con cara sorprendida. Quedó impresionado del estado de conservación del interior. A continuación dimos unos bordos, con las velas desplegadas, para poder comprobar su estado. Y tras esto, fondeamos en la bahía, para revisar toda la jarcia minuciosamente, así como ir comprobando todos y cada uno de los rincones del barco. Que por cierto, cada vez que abrían una sentina o cualquier otro compartimento, se le abría la boca al comprador, que no salía de su asombro. El perito me indicó que los obenques, ya tenían unos años (8 concretamente) y que estaban para cambiarlos. No dejaba de ser un ardid, para que le rebajase algo el precio. Realmente, la contra-oferta que me habían hecho, me daba un margen de negociación bastante amplio, pues yo me había marcado un precio mínimo de venta bastante más bajo. Por lo que, de momento, las cifras iban encajando. Le dije que lo miraríamos a la hora de cerrar el trato, una vez lo inspeccionasen en seco. Para ello, el surveyor optó por un varadero ubicado frente al puente de Simpson Bay, por lo que tendríamos que dar media vuelta a la isla, antes de entrar. Amén de hacer salida de Francia y entrada en la parte holandesa, ya que si bien con el dingui o en coche, puedes ir de un lado a otro sin problemas, si vas con el barco, si tienes que hacer la entrada oficial al país, porque en el caso de que te pillen, la multa es considerable. El travelift para sacar el barco era enorme, abarcaba un foso de 10 metros de ancho. Y disponían de una explanada de 200 metros de fondo, por unos 80 de ancho, conde ir colocando cada unidad sobre su respectiva cama. Aunque en aquellos momentos, dado que aún era temporada alta, toda la marina seca estaba desierta. Una vez suspendido El Temido lll, con una máquina de agua a presión le dieron un merecido limpiado, dejando la obra viva totalmente a la vista. Yo le había notado, en la parte interior del casco de babor, alguna protuberancia, de 4 ó 5 centímetros, pero al estar por encima de la línea de flotación, no le había dado más importancia. Pero tras la limpieza, aparecieron otros puntos repartidos a lo largo de los dos cascos. Entonces me mosqueé un poco. La llegada del perito, a los pocos minutos de estar el barco limpio, corroboró el peor de mis pensamientos: se trataban de varios puntos de ósmosis. Se me vino el mundo encima, solo de pensar en la posibilidad de que la operación no se llegase a cerrar. Continuará ..... Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Me entraron ganas de llorar, de la indignación que sentía en esos momentos.
Cuando compré el barco, uno de los "extras" que había solicitado al astillero, era el de un tratamiento epoxi de la obra viva, de cara a proteger el casco de las ósmosis. Más de 2000€ (antes de impuestos), que de poco habían servido. Ahora solo faltaba que el surveyor hiciese el informe preceptivo del estado global del barco y que el comprador, ante la nueva realidad, en caso de seguir interesado en la compra, hiciese una nueva oferta. Mientras devolvían el barco al agua, mantuve una charla con el perito, en la que le comuniqué que pensaba en que el comprador desistiría o me haría una oferta muy a la baja. Y sutilmente, le deslicé la idea, de que no pensaba vender el barco mucho más barato de lo que teníamos entre manos. Que si por un lado accedía a lo de la jarcia firme, lo de la ósmosis se arreglaba con un saneamiento parcial. Aunque este hombre me dijo que el cliente había quedado gratamente sorprendido por lo bien que estaba el barco y que su intención era comprarlo. Y no pensaba que el detalle de los puntos de ósmosis fueran a ser un obstáculo para la decisión final. Me quedé un poco más tranquilo, pero la incertidumbre estaba ahí. A la mañana siguiente, me llegué al Geminja a ver a Manolo, para comentarle lo que había pasado y que mirásemos en los distintos varaderos de zona, cuanto podía costar el tratamiento a los cascos, para eliminar la ósmosis. Así que pedimos un par de presupuestos, en dos varaderos de la zona. Una vez hecha esta gestión, Diego y yo volvimos al barco, para hacer la salida de la parte holandesa, salir de la laguna por el mismo puente de Simpson Bay y volver al la bahía de Marigot. Y a continuación, volver a hacer la clearance en el Island Water World. Una pamplina así, te ocupa más de medio día. Por la tarde, con todo los trámites resueltos, nos volvimos a encontrar con Manuel en el bar del varadero Geminja (al que yo llamaba "El Cutre") y departimos sobre lo acontecido, al tiempo que degustábamos un ron o unas cervezas. Al día siguiente tendríamos los precios del arreglo, que me servirían de orientación para saber cuanto poder rebajar el precio, para cerrar la operación; siempre que hubiese contra-oferta, claro. Le envié un e-mail a Ariel, para ponerlo al tanto de las circunstancias y que estuviese atento ante la posibilidad, de que el comprador presentase su propuesta. El día siguiente, nada más desayunar, nos fuimos al Geminja, para encontrarnos con Manuel y ver que tal habían ido las peticiones de presupuestos. Ya tenía los precios y para sorpresa mía, no se disparaban. Igual, hacer ese mismo trabajo en España, hubiera resultado más económico, pero había que calcularlo con los precios de allí y me acordaba de los 100$ la hora que cobró el técnico que vino a reparar el compresor del arcón frigorífico y se me antojaba un disparate el arreglo. Pero cuando me dio la cifra, quedé más tranquilo. Si sumábamos el arreglo de la ósmosis y el cambio de los obenques, la cantidad dejaba mucho margen para poder cerrar la operación. En un par de días llegó la contra-oferta del comprador. Y para sorpresa mía, la rebaja que solicitaba, estaba por debajo del precio del arreglo de la ósmosis. Y además, no hacía mención a lo de cambiar los obenques. Así que, sobre la marcha, le dije a mi bróker que la aceptábamos y que se pusiese en marcha con la documentación. Mientras se elaboraban los contratos (tanto en inglés como en español), me dediqué a buscar amarre, para dejarle el barco en puerto al comprador, que vendría a recogerlo una vez estuviese yo de vuelta en España y hubiese resuelto varios trámites relacionados con la solicitud de la baja de bandera, la radiobaliza ... y el más importante, que hubiera enviado los euros a una tercera persona en España. Ante la complejidad de la operación, el comprador, además de bróker, decidió nombrar a un abogado de Mallorca, para que mediara en la operación y se asegurara de que la documentación estaba toda en regla. El recibía el dinero de los EEUU y luego me pagaba, tras ir presentándole los papeles que nos solicitaba. Y después de haber cobrado, yo le daba autorización al puerto en San Martin, para que le diesen las llaves del barco al comprador y se llevase el barco. Todo muy medido, para que no hubiese ningún tipo de fraude, ni por mi parte, ni por la suya. Como el abogado era mallorquín, me dirigí a un amigo que tengo allí, que por cierto también es abogado, para pedirle referencias de la persona que había contratado el yanqui. Mi amigo me comentó que era una persona muy formal y que podía estar tranquilo con su mediación. Entonces, le llamé personalmente (al abogado de la parte contraria), para presentarme. Le dije que había tenido muy buenas referencias de un amigo común y que eso, por mi parte, facilitaba las cosas. En estos casos, la confianza que te ofrecen las personas con las que negocias, es primordial. Para cerrar el tema de la venta, tras varios días confeccionando el contrato, al que hubo que hacer alguna pequeña modificación, se firmó y quedamos en que le dejaría el barco en la Marina Port Royal, dentro de la laguna, en su extremo NE, frente a los restaurantes Le Main à la Pâte y el Spinnaker, lugares que solíamos frecuentar casi a diario. Luego, el tema de la documentación no llegó a cerrarse del todo, hasta el mes de Diciembre, con el envío de los últimos documentos y la entrega por parte del comprador, de un "piquillo" que se dejó pendiente, precisamente para cuando se entregasen todos los papeles. Y aquí se dio un ejemplo, de lo que supone la confianza entre las partes. El yanqui no se fiaba de mandar el dinero, si antes no le enviaba los papeles. Entonces hablé con el abogado de Mallorca y le pregunté: ¿tu tienes los euros?. Me dijo que si, que se los había mandado, pero que no me los podía entregar hasta que no intercambiásemos la documentación. Le respondí: pues como tu no vas a venir a Sevilla para esta simpleza y yo no voy a ir a Palma, te los voy a enviar por correo certificado y cuando los tengas, ya me mandas una transferencia. Dicho y hecho. Diego, regresó unos días antes que yo. Tuve que esperar a que la operación estuviera totalmente cerrada y el barco en su atraque. Es más, si me volví pocos días después, fue porque tenía que hacer los trámites en España, antes de que se pudiesen llevar el barco para los EEUU. Y aunque había reservado un mes de amarre en la marina, tampoco sabía cuanto tiempo me iban a llevar las gestiones a realizar, así que la vuelta tampoco se demoró mucho. Y aunque fueron pocos días, los recuerdo con agrado. Me resultaron parecidos a los que había pasado el año anterior, cuando Urtzi y Piedi se marcharon y me quedé solo fondeado en Fort de France. Continuará ..... Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Huevos fritos con patatas para el amigo Diego. Lo del paquete de cereales,
es para no salpicar más la cocina. El cartón chupa muy bien el aceite. :cunao: https://fotos.subefotos.com/781998b2...7e5ff7dbdo.jpg Las patatas bien doraditas y crujientes: https://fotos.subefotos.com/b91afef9...047654d32o.jpg Y a la bañera a zampárselas: https://fotos.subefotos.com/d94cf5fa...55145b1f2o.jpg Por cierto, ahora peso 10 kilos menos. :santo: :cunao: :cunao: :cunao: Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
"Sopeao" caribeño. La cama sigue estando "al lao". :cunao:
https://fotos.subefotos.com/fe2fb52e...64b669324o.jpg Pesca del arrecife. https://fotos.subefotos.com/e9568a12...d3bfd5b6fo.jpg De la mar al plato, previo paso por el horno. https://fotos.subefotos.com/38ccc097...e414e7965o.jpg Imagen demasiado frecuente: barco hundido por efecto de un huracán. https://fotos.subefotos.com/2dfcb553...df84d9498o.jpg Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Un tripulante apañado. Igual vale para un roto, que para un descosido.
https://fotos.subefotos.com/bf9bcf57...f634edaa6o.jpg Paseo por el canal de Rivière Salée, que separa las dos islas que forman Guadalupe. https://fotos.subefotos.com/ed3f8a0c...47d6f262eo.jpg Le Îlet du Gosier, el primer fondeo tras salir de Pointe-à-Pitre. https://fotos.subefotos.com/96e18dd2...c86bea95fo.jpg El pueblo de Le Gosier. https://fotos.subefotos.com/49b6e925...1654f2cc7o.jpg Fondeo de Sainte-Anne. https://fotos.subefotos.com/21414dff...c44c40635o.jpg Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Los Santos (en el centro) y Guadalupe (a la derecha), vistos desde Folle Anse, en María Galante.
https://fotos.subefotos.com/b88d2eee...c7fdc4766o.jpg La hora del chupito. https://fotos.subefotos.com/624be465...40949e2b4o.jpg Muelle de Saint-Louis. https://fotos.subefotos.com/49f2fb47...904225831o.jpg Fondeo en Anse du Bourg; al fondo Îlet à Cabrit. https://fotos.subefotos.com/773e2215...2d7e7c9dbo.jpg Entre Guadalupe y Monserrat. https://fotos.subefotos.com/b615dee9...fd1b44b9do.jpg Cara oeste de Monserrat. Se puede ver como la lava llegó hasta la mar. https://fotos.subefotos.com/079d6f40...73412072bo.jpg El Geminja. Lo de llamarlo "El Cutre", no era un antojo. :cunao: https://fotos.subefotos.com/239b60aa...94959b0cbo.jpg Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
El día que se marchó Diego, no dejaba de ser un poco triste. No me gustan
las despedidas. Fran nos llevó en el coche hasta el aeropuerto Princesa Juliana, el de la parte holandesa, ya que es internacional. Desde el otro, el de Grand-Case, solo se vuela a islas vecinas. Le vimos alejarse, camino del puesto de facturación. Se me antojaba contento, pues iba a volver a ver a su pareja y a su familia, tras casi cuatro meses. Me daba la impresión, que le apetecía mucho. A ese respecto, se podría decir que soy algo más "descastado". Aunque, por supuesto, también tenía muchas ganas de ver a mis nietos, mis hijos y mi esposa, el saber que estaban bien me dejaba satisfecho. Y es que si se quiere hacer un largo viaje, en el que se va a estar muchos meses fuera, hay que estar vacunado contra la nostalgia. No se puede estar todo el tiempo pegado al teléfono o al ordenador, pendiente de los orarios, para hacer videollamadas diarias y/o estar continuamente respondiendo mensajes de Whats App. Porque entonces, ni se está aquí, ni se está allí. ¡¡Carpe diem!!. De vuelta, Fran se quedó en el Geminja, con su esposa, Nuria y Manuel, para comer en el pequeño "chiringuito" que llevaban ellas, donde daban menús a medio día, para los trabajadores del varadero. Una vez que cerraban el comedor, se quedaban los cuatro para comer. Luego ellas cerraban "el negocio" y ellos continuaban con su trabajo (los dos eran empleados del varadero). A mi no me apetecía comer aún, por lo que decidí irme al barco dando un paseo. Lo habíamos dejado esa misma mañana, al fondo de la Marina Port Royal, frente al Spinnaker, a menos de 500 de donde comían nuestros amigos. Y caminando de vuelta al cata, dejando la mente en blanco, sin pensar en que hacer o dejar de hacer, me invadió una estupenda sensación, que hacía que me sintiese ligero, como si flotase. ¡¡No había fumado nada!!, os lo juro. Pasé por la puerta de un bar, donde días antes habíamos visto perder al Madrid 2-0 ante el Borussia Dortmund y "se me antojó" una cerveza. Esta vez no tenía que consultar con nadie. No tendría que pensar si era mucho o poco lo que costaría. Simplemente me apetecía y lo único que tenía que hacer era acercarme a la barra y pedirla: "une bière, s’il vous plaît". Son esos pequeños detalles, los que en definitiva, determinan nuestras futuras acciones. En aquel momento, acababa de convertirme en un navegante solitario. O como mucho, con mi pareja. Esa noche dormí profundamente. Los restaurantes de la marina cerraron pronto (para nuestra manera de ver los horarios) y un omnímodo silencio se apoderó de los pantalanes. No había viento sobre las jarcias, que hiciese repicar la driza en el mástil de algún velero. La calma había estallado. Y esa noche soñé. Soñé con el niño que era, al que el cuerpo se le iba haciendo viejo. Soñé con los proyectos vividos y con los que estaban pendientes. Soñé que no importaba cuantos llegarían a hacerse realidad o cuantos se quedarían en el camino. Soñé que la vida es una senda, por la que nos vamos abriendo paso, para alcanzar nuestros objetivos, para encontrarnos a nosotros mismos. Soñé que mientras te buscas, sigue quedando senda, sigue quedando vida. Soñé con que era un niño, aunque no extrañaba llevar un cuerpo viejo. Eufórico me levanté a la mañana siguiente. Al quedarme sin barco, tras la venta de El Temido lll, mi intención era la de darle rienda suelta a una idea que tenía desde joven, que no era otra que hacer mi propio barco. Ya tenia en mente muchos de los datos y de los números, que iban a darle forma. Pero esta noche había subido a bordo. Tenía ganas de contárselo a los amigos y me fui directo al Geminja, donde me encontré con Svetlana y Gabi, que ya habían vuelto de hacer el chárter en las Islas Vírgenes Británicas, que estaban junto con Manuel y Fran. Brindamos por la venta de El Temido lll y por el nuevo El Temido lV ..... o como se vaya a llamar. Un día después, ya estaba volando desde Grand-Case a Pointe-à-Pitre, capital de Guadalupe. Para desde allí, seguir hacia París y luego a Sevilla. Entre vuelos y esperas, 24 interminables horas. Veinticuatro interminables horas, que te dan tiempo para reflexionar. Para hacer balance de lo vivido en este tiempo. Valoras las muchas maravillas de la naturaleza que has visitado, desde la inmensidad del océano, a los arrecifes de coral, o la exuberante vida salvaje de mar Caribe. Pero también tomas nota del esa especie de viaje en el tiempo que haces, que te vuelve a llevar a calles sin asfaltar, a desagües sin canalizar, a viviendas sin agua potable, a personas sin vestimentas mínimamente aceptables... en definitiva un mundo que aveces, te recuerda al de tu infancia y al que le damos la espalda. Y por último, añadiría ese viaje que se hace hacia el interior de uno mismo, que te ayuda a conocerte. Y si amigos, trae a cuenta. Son tres viajes, por el precio de uno. :o :o :o Epílogo: Es evidente, que la ausencia de la más mínima épica, unido a mi escasa capacidad prosaica, no pueden hacer que esta narración, sea considerada literariamente de valor alguno. Agravado, además, por el hecho de tratarse de un viaje, donde ni siquiera se le rompe una uña a cualquiera de los protagonistas. Ciertamente, poco había que contar. ¡¡Demasiado he alargado esto!!. :cunao: :cunao: :cunao: Pido disculpas por ello. :sorry: Muchas :gracias: por haberme acompañado hasta aquí. Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Y ahí lo tenéis (de izquierda a derecha, el tercer palo), en su amarre de la
Marina Port Royal, frente al Spinnaker, a la espera de su nuevo armador. Buenos vientos y proa clara, para El Temido lll. :velero: :velero: :velero: https://fotos.subefotos.com/5a9a5f0c...1402605c6o.jpg Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Cita:
Dejando a un lado la "crítica literaria" que no podría hacer por no considerarme con aptitudes para ello, si deseo agradecerte todo el tiempo que has empleado en compartir con todos los que hemos podido seguirte, tus aventuras, vivencias y experiencias personales, y el cuidado que has puesto en detallar al máximo hechos distanciados en el tiempo con su posterior redacción, y considero que a la valentía y decisión que hay que tener para emprender un viaje de esta magnitud, hay que saber sumarle la generosidad de compartirlo para que las satisfacciones que te dió se multipliquen en el tiempo y en el sentir de los que hemos tenido la oportunidad de leer tus crónicas... Muchas gracias de nuevo...:gracias::gracias::gracias: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Cita:
Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Gracias por el hilo César ¡¡¡ ha sido un poco largo en el tiempo, pero corto de duración. Bien explicado y documentado.
Un poco "chafao" me he quedado con la venta del barco. Siempre pensé que eras "un hombre pegado a un cata". Por otro lado, se cumplió el viejo dicho " la mayor alegría de una armador, es la compra del barco y más aún la venta " o algo así. Ya nos contarás nuevas noticias sobre el próximo "TEMIDO".. Un abrazo.:cid5: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Muchas gracias amigo.
He disfrutado con tú relato desde el primer episodio. Nos lo has ido entregando poco a poco, gota a gota y hemos ido saboreándolo de igual manera. He viajado por el Caribe contigo desde el escritorio de mi despacho y he ido soñando con imitarte en el futuro. Tú no lo sabías, pero yo era esa mosca que revoloteaba por ahí de vez en cuando y que venía de no se sabe donde. Muchos día he abierto el ordenador a la espera de ver si había una nueva entrega y temiendo que fuera la última. De nuevo muchas gracias y espero que sigas soñando como niño para tus nuevos proyectos sean cuales sean. Un abrazo fuerte |
Respuesta: Y El Temido lll se fue al Caribe
Muchas gracias por tu ilustrado relato y tu despedida tan sincera y profunda, me he visto reflejado en alguna sensación de libertad y gratificante soledad en alguna travesía mía, aunque no tan lejos.
Esperamos nuevos relatos pronto :brindis::brindis::p:p:p:p |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Muchísimas gracias por tu relato ,ha sido un placer seguir todo el hilo .:adoracion::cid5::cid5:
No dejes nunca de soñar. :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Pues yo , sin conocerte de nada, pero tras leerte, te definiría como un tipo que le echó huevos a la vida y a base de trabajo ha conseguido llegar donde se propuso.
Ya que te llamen como quieran, tú’tas coronao :pirata: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Cita:
:gracias: a ti Sito, por leerlo. La verdad es que sigo enamorado de los catas. Pero para navegar solo, resultaba demasiado barco y demasiado caro. No es que haya sido una alegría el venderlo, pero supone eliminar gastos, que ahora que soy pensionista, debo tenerlo en cuenta. Espero traer pronto noticias sobre el nuevo El Temido. :D Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Muchas gracias por tu maravilloso relato y ahora a seguir disfrutando!!!!!!:brindis::brindis:
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Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
El nuevo Temido estará por el Rompido??:brindis:
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Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Cita:
Me alegra que hayas disfrutado del relato y que te haya evocado los aires caribeños. Deseo que tus proyectos, lleguen al mejor puerto y que nos lo puedas contar, para que nosotros lo leamos con las mismas ganas, que tu has leído este. Un fuerte abrazo y hasta la vista (¡¡que ya queda menos!!). :brindis: :brindis: |
Re: Respuesta: Y El Temido lll se fue al Caribe
Cita:
Realmente no importa la distancia, sino que las sensaciones sean gratificantes. ¡¡Bravo por ti!!. :velero: :velero: :velero: Salud y :brindis: |
Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Cita:
para "navegar" en tiempos de confinamiento. Y me alegra saber que te has entretenido un poco con la historia. :D Te haré caso y no dejaré de soñar ni estando despierto. :sip: :sip: :sip: Salud y :brindis: |
Respuesta: Re: Y El Temido lll se fue al Caribe
Cita:
La verdad es que nunca me ha preocupado en demasía "el que dirán"; creo que de haberme preocupado, no habría tenido tiempo de alcanzar los objetivos que perseguía. Un fuerte abrazo. Salud y :brindis: |
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