Estoy de acuerdo con los que opinan que no debemos hacer juicios sin conocimiento de causa, pero es que la semana pasada "fuentes generalmente bien informadas" me contaron algo que no me resisto a dejar de contaros. Como que no voy a revelar estas "fuentes" me limitaré a contar un cuento.
Una noche salió de Ibiza un buque llamado Don Pablo, una vez fuera del puerto alguien comentó después de programar el piloto automático.
- Ya he conectado el piloto, rumbo a Valencia.
- ¡Que dices a Valencia, pero si hoy vamos a Palma!, le contestaron.
- ¡Ostras, vaya despiste! Ahora mismo lo cambio.
Y así lo hizo, pero sin pensar donde estaban los dados, ni que podíamos estar navegando por allí cualquiera de nosotros.
Y colorin colorado, este cuento se ha acabado.
No voy a hacer ningún comentario a este cuento, pero sí tengo algo mas que decir respecto al Don Pedro ese que que se ha hundido, y esta vez es una experiencia que viví en primera persona.
Hace ya algunos años estábamos acabando la regata larga de la Copa del Rey, serían las siete de la mañana y estábamos a unos 100 m. de la llegada, que estaba situada entre la escollera del puerto de Palma y un boyarín colocado a unos 300m de la misma. Estábamos casi encalmados, justito gobernábamos, y vimos a una milla de nosotros a un mercante que nos venía a rumbo de colisión. No se que velocidad llevaría, pero veiamos como se nos acercaba sacando unos enormes bigotes por la proa. Pensamos que se deviaría para pasarnos por la popa y para alejarse de la escollera, pero no fue así, nos pasó a unos 5 o 6 metros por la proa y cruzó triunfalmente la línea de llegada de la regata. A ninguno de los que íbamos a bordo se nos olvidará nunca el nombre que llevaba escrito en la aleta, DON PEDRO... y esto no es un cuento pues tengo siete testigos que pueden corroborar que no me dormí ni estaba soñando.
Cuando el cuento se haya hecho realidad (yo confío al 100 por 100 en mis fuentes, pero no puedo tener la certeza de que fue así) me desfogaré un poco más sobre las irresponsabilidades que se ven navegando por esos mares de Dios.
Mientras tanto un brindis por las vacaciones

y las próximas navegaciones. A mi ya me falta poco para salir de Palma rumbo al Guadiana a bordo del Cala Gat, un Cruz del Sur 32 con un enorme gallardete LTP en la cruceta de babor.
Buenos vientos a todos