Día 2. Agrópoli - Amalfi
Nada más levantarnos y el consiguiente desayuno a bordo para disponer de reserva de fuerzas a lo largo del día salimos de puerto haciendo una pequeño alto para el primer chapuzón en el Tirreno.
A la media hora, ya que hasta el momento no había prácticamente viento, pudimos desplegar velas indicando el anemómetro un viento aparente de 16 nudos. Lejos de nuestro punto de destino y con rumbo directo gozamos de una tranquila navegación con rachas en algún momento de 22 nudos
Sin posibilidad de altos en el camino y sin divisar prácticamente la costa hasta ese momento hicimos nuestra entrada en Amalfi como quien dice a la buena de Dios y me explico.
Las infraestructuras naúticas en la zona son excasas y por si fuera poco la radio en las marinas las deben de tener de adorno o simplemente carecer de ella. El caso es que muchas veces la única manera de solicitar amarre es por móvil ....¡¡si lo cogen!! ...como no fue el caso, así que con esta perspectiva nos aproximamos a ver si sonaba la flauta o teníamos que buscar lugar para el fondeo.
Afortunadamente hubo suerte y eso sí, el personal muy diligente, se acercó a nosotros en lancha para hacer ellos la maniobra de atraque, que con las dimensiones cómo para hacerla uno solo

Otra cosa, además de la falta de plazas otro inconveniente es el precio. Aviso, de termino medio salía para 15 metros de eslora en ¡¡¡¡120 euros/día!!!