Una ronda a los parroquianos

, pero con tapa.
Lo que sentimos hace unas semanas seguro que aquí en la Taberna ya son emociones lejanas... pero aun así tengo que contarlo:
Ando ya para los casi 3 años que me enamoré como una tonta de un viejo Sirocco que andaba metido en una nave, desarbolado y polvoriento. Sin mas experiencia que un curso de raquero, pero con mucho mimo y paciencia ha ido rejuveneciendo y nosotros con él.
Hace unos días coincidimos en puerto con una pareja de amigos navegantes con muchísimas millas y, despues de navegar en su pequeño velero de 20 pies, salimos con levante 4/5 en el viejo Sirocco, con el tercer rizo y mis dos pequeñas de 3 y 1 años enfundadas en sus salvavidas.... que emoción ver como pasaba las olas, como escoraba y se recuperaba tras el paso de alguna ola más grande. ¡¡¡ Para colmo pasamos junto a una gran tortuga marina !!!!
Cuando regresábamos para puerto nuestro amigo me dijo "¿sabes que tienes mucha agua fuera de la sentina?"....

otra vez el dichoso prensaestopas del viejo Volvo... pero esa es otra historia.