Olé por reconocerlo!
Por lo que cuentas será difícil que te ocurra de nuevo.
La mar y el viento que me obligaron a buscar refugio en La Vila y pasar un mal rato en mi primera jornada, nos parecerían hoy poco menos que divertidos.
Después reconozco una ocasión en que, saliendo en solitario y sin piloto, la mar y el parte aconsejaban quedarme atracado y pasé las de Caín por cabezón.
La última fue el 19 de enero y esta pienso que colectiva; "tengamos presente que hay anunciada ciclogénesis explosiva" nos advertían en la reunión de patrones.
Alucina vecina la que se montó en cinco minutos. Ni Caballer ni Brunchú. No llegué ni a oír por radio que se anulaba la regata.
El gps marcó una punta imposible de 8knt!!!! y estuvo varios minutos sin bajar de 7 (para un Hunter Europa impensable) mi compañero enfundándose el traje de agua (el había dado el aviso del negro nubarrón que se acercaba y yo, chuleta, le había restado importancia), mientras el que os lo cuenta, con viento por la aleta y el génova de bandera, trataba de mantener el rumbo y no comerme la "penyeta del moro".
Gracias a quien corresponda porque inexplicablemente no rompimos nada y lo más importante no hubo que lamentar desgracias personales. A excepción del remojón y el conato de pulmonía que aún me acompaña.
Ya en puerto y con una cerveza en la mano, mi compañero de fatigas me hacía ver que nunca me había visto tan serio y concentrado, no pude evitar confesarle que mis calzoncillos no volverían a ser los mismos...
Esto es como la decisión de tomar un rizo, si piensas en algún momento que lo prudente ese día es no largar amarras: no lo dudes, quedarse en tierra es
la opción.
El que esté libre de ..garla que pague la primera ronda.
Esta es mía para los que se hayan "merendado" el ladrillo. Bon Vent!!