Esta mañana me he reído como hacía tiempo que no lo hacía leyendo una travesía desde Denia a Ibiza con un "puto perro". Me decidió a, incluso desde tierra (hasta que aumenten mis dotes persuasivas), hacerme cofrade con vosotros.
Lo que he estado leyendo sobre este hombre me ha emocionado más, y me hubiera decidido todavía más rápido que las risas.
De nada sirve una comunidad si no está soportada por seres humanos. Os deseo lo mejor, desde la distancia.
