Hola
Hace años (unos 10) en un crucero vida abordo de buceo por el Mar Rojo Sur, una de las atracciones estelares eran los Deep Blue, como llamaban los guías nativos a ese tipo de inmersiones...
El tema consistía en abandonar el barco de buceo abordo de unas semirrígidas rumbo a (un movidito) mar abierto y llegados a determinado punto, desinchar los chalecos y saltar simultáneamente (a la de tres) todo el grupo para hundirse lo más rápido posible hasta la profundidad requerida para la inmersión, que variaba entre los -30 y los -40 metros. Una vez allí, siempre pendientes del profundímetro y el manómetro, la inmersión consistía en dejarse arrastrar por la corriente que, a los 10-15 minutos, nos llevaba hasta arrecifes sumergidos, donde terminaba la inmersión viendo pececitos de colores y corales...
El propósito de este tipo de inmersiones era ver pelágico gordo y, en esos años, se veía, se veía...
La sensación de estar en el agua, descendiendo a toda velocidad, sin ver nada más que azul (y a tus compañeros de inmersión, claro) y quedar después "suspendidos" en medio de la nada, provocaba en algunos compañeros un mal rollo parecido a lo que cuentas. Vi a gente pasarlo mal la primera vez y no querer repetir.
A mi, al contrario, la adrenalina me mantenía concentrado y la espectativa de ver bicho gordo hacía que los minutos pasasen muy rápido y que, cuando la corriente nos llevaba al arrecife, a mi me apeteciera, ascender y que la zodiac me hubiese tirado de nuevo al principio de la inmersión
Pero yo no tengo vértigo... no se si cuenta
Saludos y