
Navegando este verano en la Ria de Vigo. En el tiempo que yo cruzaba la ría, este bicho iba hasta Cies y volvía a Vigo. Impresionante en las viradas: de repente oías un trueno en un día despejado, pero solo era el flameo de sus velas. Es bonito verlo navegar por nuestras aguas pero (y esto es para consolarse) supongo que las sensaciones al navegar no serán tan intensas como en nuestros barcos más modestos.
Un saludo y
