Bien explicado por Xepe.
La cosa funciona así:
Cuando acaba la concesión, el concesionario debe entregar a la administración todas las instalaciones en perfecto estado (o en el estado que estén y pagar una cantidad para su reparación).
La administración abre concurso, al que se pueden presentar el antiguo concesionario -por ejemplo un club náutico-y quien quiera (empresas que quieran montar el puerto deportivo como negocio). Además la Administración suele exigir se realicen obras de mejora, etc...
Una vez adjudicada la nueva concesión, si el concesionario es el mismo anterior (p.e. un club náutico), los antiguos "propietarios" suelen tener unos precios y condiciones especialmente ventajosos para continuar.
