Cita:
Originalmente publicado por Alf_on
Es curioso que, como ha sucedido con muchas otras obras maestras, Moby Dick fue ninguneada en su tiempo, para ser aplaudida incondicionalmente con posterioridad.
Nadie hoy puede alardear de no conocer esta magnífica novela, aunque solo sea de forma cinematográfica con la primera y magnífica película de Gregory Peck. La ballena blanca queda así en nuestra memoria grabada de forma indeleble.
El toc toc de los paseos insomnes del capitán Ahab sobre la cubierta del Pequod, la formidable pelea de la tripulación persiguiendo a la temible ballena, y un final apoteósico en la que vence al final la bestia, resuenan en nuestra memoria. La obsesiva persecución con trágico final. Una obra maestra, sin paliativos.
¡¡¡Por allí resoplaaaa!!!
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Lo cojonudo del tema es que la ballena que aparece en el filme no es tal
porque se trata de un cachalote (Physether Macrocéphalus), un odontoceto con un solo espiráculo en el lado izquierdo de lo alto del cráneo. Craso error
de no sé quién