He descubierto el panteón y estoy hecho polvo
Tras larga estancia entre montañas entré hace unos años en la taberna y el golpe fue tremendo al ver la pérdida de cófrades que además eran buenos amigos, lo que unido a otras circunstancias menos importantes, me volvieron a alejar de la actividad náutica y hoy vuelvo a la taberna y me encuentro este panteón con muchos camaradas más, viejos conocidos unos, nuevos y desconocidos otros. Voy a mencionar a Polen en nombre de todos, por lo que supuso para esta taberna.
Expreso aquí mi dolor por todos, no me encuentro con fuerzas para hacerlo uno por uno.
Esta vez no huiré, seguiré en vuestra maravillosa compañía, si todavía queda un taburete en un rincón, que lo que es de pie aguanto poco.
Hoy no soy capaz de brindar.
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