En mi puerto, con todas las cámaras del mundo, un tipos saltando desde el muelle de barco en barco hasta llegar al mio, se metieron a merendar, dejando abiertos los pianos de las drizas y escotas (no tengo enrollador, por suerte) y todas las cervezas por allí tiradas. No follaron en mi barco por que para hacerlo hay que ser un acróbata.
