Supongo que casi todos sabéis algo del acorazado alemán Bismarck, si no es así, echad un vistazo aquí:
http://www.kbismarck.com/spanish . Sólo voy a deciros de él que de sus más de 2200 tripulantes, tras ser hundido sólo se recogieron 116... humanos, pero tampoco voy a hablar de ellos ni de la masacre que supuso la batalla del estrecho de Dinamarca por ambos bandos (que descansen en paz ajenos al horror que les tocó vivir) sino de otro superviviente, el gato del Bismarck, que a su vez fue recogido y adoptado por un destructor inglés, que poco después fue hundido por un submarino alemán. No se cuantas vidas había gastado el gato, pero no importa, ya era un gato inglés y estos tienen nueve vidas en vez de siete. Además fue rescatado por un portaaviones inglés y todavía sobrevivió a otro naufragio.
Como compensación a una vida tan azarosa, se dispuso un nuevo destino para el gato del Bismarck, la Casa del Marino de Belfast, donde terminó placidamente sus días ¿Fué ese el motivo o alguién pensó que ese gato era un gafe?.
Más información en la actual exposición sobre los animales en la guerra, en el Museo Imperial Militar británico o en un dominical reciente del diario El País (este último con errores cronológicos de bulto, creo recordar)
Salud y Felíz año 2007 para todos, en paz