Buenos dias, señores; café para todos.
Puestos a poner pegas a semejante bellezón, puedo aportar dos: bañera demasiado pequeña, aunque se compensa con la cubierta, y la profusión de maderas, que te obliga a tener que contratar a una colla de inmigrantes ilegales para lijar y barnizar de forma contínua durante toda la temporada, pese a ser un barco de fibra.
Por lo demás, precioso.