El problema es que cada "ingeniero" de la ITB y depende de la empresa concesionaria tiene un criterio propio.
A veces exigen cosas que ni en la propia Capitanía se atreverían a solicitar.
Hablando en alguna ocasión "con la autoridad competente", recordando cuando ellos eran los que realizaban las inspecciones, me comentaban que se fundamentaban más en la lógica y los criterios propios por su larga experiencia en el mar. Hablan en el mismo "idioma" que el inspeccionado de turno. Y que aconsejaban.
A veces pienso que los que realizan las ITB, no son gente de mar, si no funcionarios que con la ley en la mano hacen que se lleve todo literalmente según el contenido de la misma.
