yo había oido ese, y también el de salir a la mar y ya lejos de la costa tirar algo de hierro al agua y dar una vuelta entera alrededor de ese punto.
yo estoy en pleno trámite de cambio, pero en mi caso el nombre actual es una puñetería para el pobre barquito, así que estoy seguro que me agradecerá con muchas y felices navegadas que se lo cambie por el nuevo.
