Telémaco es su nombre.
Bavaria 42, que ha tenido el honor de embarcar a bastantes cofrades.
Y ya está, a estas alturas, nervioso, tirando de las amarras, inquieto con la luna creciente, pidiéndome que por las olas le haga a la mar.
A punto de comenzar
El Crucero de Rik (v. 2007)
Tranquilo, tranquilo.
Y a pesar de sus nervios, ni le suenan los mamparos, ni está "despernao", y parece que la quilla, y la orza, y todas sus cositas, por el momento, siguen en su sitio. Y el armador, y la tripu, tan contentos también. Contento él, contentos todos.
Que nos vamos para el sur. Que los mares del sur nos esperan.
