Tristísimo y decepcionante. Un solo velero, un TESS 28 como todo exponente de la vela de crucero en Gran Vía, y en el Port Vell el más pequeño un Bavaria 32.
En acuerdo con otras opiniones, debería ser en estos momentos con más necesidad de ventas, cuando astilleros como Beneteau o Jeaneau por nombrar un par expusieran las novedades o barcos más populares en cuanto a esloras y no solo de 40 pies para arriba y solo a flote.
Esperemos que sea puramente coyuntural y en ediciones futuras volvamos a una cierta normalidad; yo, como aficionado modesto a la vela de crucero, el año próximo si es como este no voy.
Saludos y

para todos.