Hola jlp!
Lo que dices es muy común, de hecho en el puerto donde tú y yo vivimos había varios barcos hechos polvo donde vivia gente pero los echaron. Como no tenían ni motor los remolcaron al Forum y al Port Vell, a donde se mudaron.
Cada vez hay mas puertos en España donde no quieren gente viviendo en pecios o similar por una cuestión de imagen, por ejemplo en El Masnou no está bien visto; sin embargo hay en Europa auténticos barrios flotantes donde todo el mundo vive en esas este tipo de "viviendas", incluso hay tiendas y otros negocios montados en barcos que no navegan, que es el concepto que tú has expuesto.
No es tu caso, ni el mio, que tenemos barcos bien mantenidos y navegamos en ellos. Para mi, la gran ventaja de vivir a bordo es la sensación de libertad. Es decir, si quiero cambiar el chip y largarme por ahí a donde me lleve el viento no tengo mas que soltar cuatro amarras y listo; ni maletas, ni billetes, ni reservas, ni hoteles, ni caravanas en carreteras, ni señales o semáforos, ni multas, ni largas colas, ni peajes, ni esperas, ni na ni na.
El día a día también tiene su encanto, aunque no salgas a navegar: levantarte por la mañana y dar un paseo a los perros por el pantalán sin atarlos, medio en pijama, charlando con los vecinos que ya son tus amigos... olvidarte de llaves, ascensores, puertas, parkings.. hacer la vida más sencilla, sin tantas cosas que antes necesitabas y ahora te das cuenta de que eran lastres...
Los atardeceres en el puerto son preciosos, el sonido de las drizas te acompaña siempre en vez de los ruidos de los coches, cuando hace bueno desayunar o cenar en cubierta con ese aroma a mar, y la brisa no tiene precio, contemplar las estrellas mientras te tomas una copita con buena musica, no tiene precio, echarte una siesta a la sombra con el meneito no tiene precio... y en invierno si hace frio te refugias dentro, y con un calefactor pequeño consigues un ambiente agradable, un buen edredón para dormir, tus libros, tu música, tu ordenador con internet... y muchos menos metros que limpiar. No tienes bañera, no tienes chimenea, no tienes muchos armarios, pero tienes la posibilidad de ir donde quieras con tu hogar a cuestas, como los caracoles, y bañarte en esa maravillosa piscina infinita que es el mar
Es una filosofía de vida que me encanta, donde todo se simplifica, ofreces lo que tienes a tus vecinos y ellos lo hacen contigo, hoy cenas en el barco de al lado y mañana vienen los del pantalán exis a visitarte, sin agendas, sin planes, sobre la marcha.. Cuando vivía en Madrid era complicadisimo quedar ocn los amigos, buf!
Sin embargo no todo son ventajas; un barco necesita mucho mas mantenimiento que una casa, si es muy grande es muy caro, si es muy pequeño es mucho mas incomodo... tienes que cambiar la mentalidad para prescindir de muchas cosas que no te van a caber, te tiene que gustar mucho, pero si es así no lo cambiarías por nada. Mi marido ya no duerme cuando lo hacemos en tierra; después de 15 años a bordo echa de menos el balanceo, mis perros se sienten encerrados si no campan a sus anchas por la cubierta, y yo me estreso sólo de pensar en la zona azul jajajajaja
Cubatas de ron para todos


