
para este mediodía soleado.
La verdad es que será todo lo tecnológicamente aluciante, que desde luego lo es, pero la imposibilidad de comparaciones tan cercanas como las que permite el macht-race de monotipos, en los que se apuran las reglas de diseño sobre una misma base, creo que le quita encanto. Aunque sean realmente impresionantes los bichos que llevan, al final veremos dos bólidos, cada uno por su lado, cogiendo su rumbo más favorable y en un par de horas asunto resuelto. Creo que para eso no hace falta tanta parafernalia. No sé, lo mismo es una tontera mía, pero esto me resulta como tener que elegir entre una prueba de Dragster (o como se escriba) o una carrera de F1.
P.D. Por cierto, respecto a un comentario anterior, creo que sí podría darse el caso de que compitan dos desafíos del mismo país en la final.