Yo tambien pasé por ese desdichado trance.
El caso es que antes de haber vendido el pinguino ya tenia comprado su sucesor que afortunadamente tambien llego a ser Pinguino. Puede que algunos piensen que me alegraria mucho de venderlo ya que necesitaba la liquidez para pagar por el nuevo pero... aún así, el dolor y la sensación de vertiginoso vacio que sentí cuando su nuevo propietario se lo llevó fué indescripiblemente dolorosa.
Pasaron unos pocos dias antes de que el patron que lo iba a trasladar viniera a por el. Cada dia lo visitaba allí, en su amarre, a pesar de saber que ya no era mio, ya no me pertenecia. Pero el dia que ví a dos jovenes que vinieron para llevarselo, sentí una punzada de celos tan fuerte como si hubiera pillado a la novia con mi mejor amigo en la cama.
En fin, que fue muy muy duro. Y eso que al nuevo solo le faltaban dos meses por venir. Pero durante esos dos meses sufri como su hubieran sido dos años. Hubiera navegado hasta en un balde de plastico.
Ahora... eso si, cuando llegó el nuevo pinguino solo me sentí alegre y deseé con verdadero entusiasmo que el nuevo propietario del ex-pinguino (Que tal Aleix espero que lo disfrutes), se lo pasara bomba con el.
En fin Atarip, espero que la espera (nunca mejor dicho), no te sea tan dura.
