Monta el extractor en la rueda. Pon alrededor del extractor, una o más bridas metálicas que mantengan sus patas cerradas y en posición. Aprieta el tornillo central del extractor hasta que no puedas mas. Calienta el buje de la rueda con un soplete de aire caliente. Con un poco de suerte la rueda debería saltar sola cuando coja temperatura.
