Pos agárrense los machos, que esto que voy a contar duele na más pensarlo.
Recién estrenadito de médico estaba en la puerta de Urgencias no digo de dónde porsiaca. El caso es que me llama el ATS (por aquel entonces se les llamaba así, ahora son DUEs) y me dice... Dr. Tal. Ahí fuera hay una chaval con muy mala cara. Como el ATS era perro viejo le hice caso y le pasé el primero. Unos 18 añitos más o menos.
-¿Qué le ha pasado?.
-Que estaba con mi novia... y me he hecho daño.
-¿Cómo que se ha hecho daño?
-Que estaba ella encima, se ha salido, y al volver a bajar... pues eso, que me he hecho daño.
-A ver, veamos.......

Como pude reprimí un "JODEEEEEEER", y en su lugar dije, "pues nada hijo, tranquilo, espere aquí en esta camilla que voy a avisar al urólogo", pues sacó una pelotita redondita y negra como el sobaco de un grillo. Los güevetes colgaban algo más abajo aún no repuestos del susto.
La uróloga era una valenciana cachondona como ella sola.
-¿Diga?
-Doctorcita, que tengo aquí a uno que se ha partido la p... foll...!!!!
-Venga ya, coño, cómo sois los de aquí.

Anda súbemelo a la planta!
Tres horas más tarde me llama y me dice... Acabo de salir de operarle... ¡Que tenías razón! ¡Que se ha partido la p... foll...!
Mas adelante me enteré que a la novia a partir de entonces le llaman LA GUILLOTINA!!!
