Unas rondas. Si nos entienden pues nada, seguimos que en el camino a la linea del horizonte encontramos nuestras alegrias. Muy de acuerdo con lo de los valores de las personas- marinos de verdad, pero me temo que ese no es el perfil general. Todavía falta mucho para que en las Marinas y pantalanes de nuestro país se celebre y respete a los que participan en la travesía del Atlantico (la antigua Ostar) en barcos de 23 a 30 pies, sin organización, ni premios solo por el proyecto personal conseguido.
