El
Jueves 5 de Julio a las 7 de la mañana, el
Bahía las Islas parte de Valencia con José María (
Forban) y su pareja, rumbo a Ibiza.
Para el viaje hemos montado una mayor de sables forzados que lleva tres rizos y un foque autovirante de batalla, completando el guardarropa, una trinqueta, un tormentín y un spí de gramaje medio
No se han embarcado más velas de las que posee el Bahía, por que no vamos a andar en contemplaciones cuando baje el viento, máquina avante, que son muchas millas a recorrer y el tiempo, como decía mi abuelo, son habas contadas.
La meteo, para comenzar, no es muy favorable, vientos del Este anunciados de 10 nudos, en medio del canal se transforman en 15. Se navega cómodo, el autovirante como una tabla, un rizo a la mayor y el motor a bajas revoluciones para ayudar en la ceñida evitando hacer un rumbo demasiado abierto hacia el Sur.
Con EsVedrá a la vista, se recoge foque y a un régimen normal de motor ponemos proa a San Antonio, a cuya atestada bahía (no menos de 100 barcos) se llega a las 19,15h, tras 85 millas recorridas, a una media de 7 nudos.
En Ibiza se ha de esperar hasta el domingo a que llegue Iñaki desde Bilbao, siendo el tercer tripulante hasta Sicilia.
Mientras tanto, la parejita disfrutando del buen tiempo en la Pitiusa,
cala Salada, cala Benirrás y cala Portinatx. Un dato a tener en cuenta es la ausencia de las tan cacareadas boyas en la zona norte Ibicenca, muchos barcos, pero todos fondeados
Domingo 8, se acabó la luna de miel, Iñaki embarca en Portinatx, tripulación completa por el momento.
Personalmente, no estoy físicamente abordo, pero me he embarcado como tripulante virtual, en la condición de routier meteorológico y como tal, aconsejo que salgan inmediatamente antes que entre el mistral previsto para el golfo de León y que afectará en menor medida a Mallorca, sin más dilación, rumbo a la isla, la recalada, cualquier lugar entre Andratx y punta Figuera.
Viento en calma o del Nordeste flojo, se sigue con la navegación a motor.
La incidencia de la travesía, ha sido recoger a la deriva una botella de gas industrial, de las que se utilizan en oxi-corte, unos buenos 50 kgs de duro metal, que si lo pilla uno de esos tractores, que cruzan a toda pastilla entre islas, ya tendríamos incidente asegurado
. La buena obra culmina con la arribada al moderno puerto de Port Adriano.
Ante las reticencias del marinero de guardia para hacerse cargo del “regalito”, se pide la presencia del capitán del puerto, este muy amablemente, se ha ofrecido a deshacerse de la susodicha botella, en compensación se pregunta por amarre para pasar la noche; ¡¡90€, por abarloarse a la gasolinera, sin agua ni luz!!
¡¡Están locos estos romanos!! Nada, media vuelta y a fondear en la cala al lado de la bocana, ya empezamos con los atracos.
Aunque…En reconocimiento a la buena acción marinera, se nos ha permitido a la tripulación, desembarcar con la Zodiac y utilizar los aseos del puerto; se agradece el gesto.
Una noche tranquila, aunque fiel a la cita como estaba previsto, el viento del Norte ha hecho su aparición en principio con 10 nuditos.
Lunes 9 Se deja el fondeadero a primera hora, con en ricito a los 53 metros cuadrados de mayor que llevamos, por aquello de las sorpresitas, ya se sabe. Ponemos sin dilación rumbo a Cabrera, donde tenemos permiso de boya para la noche.
La travesía de la bahía mallorquina a galope tendido, la brisita se ha convertido en 20 nudos del NE tomados a un descuartelar. Mi llamada telefónica desde las antípodas para ajustar previsiones, me hacen participar las sensaciones de disfrutar una cabalgada por encima de los 8 nudos, ¡¡como se nota la carena limpita!!
A cinco millas de Cabrera la ola de fondo que llega del norte y un role un poco más al E, hace que se forme una ola bastante crecida y realmente incómoda, es necesario abrir un poco más el rumbo, para que el
Bahía las Islas, no pierda velocidad y supere con soltura el maretón que se está formando.
Sin mayores inconvenientes, a medio día amarra a boya en el puerto natural de Cabrera donde nos acompañan docena y media de barcos.
Al atardecer se toma por asalto el castillo, para desde sus alturas recibir perfecta señal telefónica y la postrera previsión meteorológica, antes del salto a Cerdeña, mañana
martes 10. El mistral se retira rápido, vía libre para la partida.
