La Taberna del Puerto Greatblue360
"Se navega por los astros, por la mar, por la tierra, por las gentes, por los sentimientos...Se navega." Altair
VHF: Canal 77   
Regresar   La Taberna del Puerto > Foro > Comunidad > Charla General

Avisos

 
 
Herramientas Estilo
  #1  
Antiguo 18-10-2013, 17:48
Avatar de DUDU
DUDU DUDU esta desconectado
Hermano de la costa
 
Registrado: 11-07-2007
Edad: 70
Mensajes: 4,213
Agradecimientos que ha otorgado: 901
Recibió 1,895 Agradecimientos en 986 Mensajes
Sexo:
Predeterminado Quienes Son Los Hermanos De La Costa Parte I

Por su tamaño, lo he dividido en dos textos.

Los “hermanos de la costa”. La piratería como preanarquismo, utopismo y revolución.

por Francisco D. de Otazú

Si el Imperio Español representaba una prolongación del ideal medieval de Sacro Imperio y "Civitas Dei", la Hermandad de la Costa era la contraparte, y las calaveras y huesos, sobre negro o sobre rojo de sus banderas, representaban la revolución "avant la lettre".


El lento, desigual, estamental, armónico, estable y religioso mundo del Antiguo Régimen fue socavado previamente a la guilotina por múltiples factores. Los eruditos y filósofos aplaudieron en un principio a Tomás Moro-aunque este declaró claramente que sus especulaciones no eran siempre realistas y realizables-, y a Campanella, la utopía, se decía, es una critica exagerada, pero inofensiva e ingeniosa de los abusos de la propiedad eclesiástica y feudal; pero muchos retiraron sus elogios en cuanto vieron a la luz de las hogueras levantada la bandera del comunismo por los campesinos de la Suabia, por los anabaptistas de Zurich y de Munster, y por todos los feroces continuadores de los wiclefitas, lalardos y hussitas, que en el siglo anterior habían aterrado o Inglaterra y la Bohemia.

Hay dos grandes líneas revolucionarias que confluyen hacia fines del XVIII en la Revolución Francesa. Una está vinculada al flanco radical de la Ilustración, entorno a Voltaire y la Enciclopedia. Otra al utopismo, Saint Simon, Fourier y Rousseau. A los primeros flanquean, en su aspecto de acratismo, los libertinos; G. Casanova, Benjamín Franklin y el Marqués de Sade eran, a la vez que corruptores personales y por escrito, teóricos libertinos de la Revolución. A la otra corriente, que desemboca en los iguales de Baboeuf, los pacíficos falansterios, el nihilismo ruso, el anarquismo latino y el comunismo libertario. Por ejemplo, Morelly, autor de la Basiliada (1753) y del Código de la naturaleza (1755), compuso una utopía puramente comunista.

Pero a todas estas corrientes acompañan unos fenómenos sangrientos y luego rodeados por un halo de romanticismo por la literatura y el cine. ¿Quién no ha perdonado su criminal pasado al simpático y temible J. Silver en La Isla del tesoro?. ¿Quién no ha sentido de niño el sueño de participar en un abordaje con Errol Flynn/capitán Blood?. Se trata de una piratería, que, como la Mediterránea del mundo clásico contra Roma, tiene un sentido ideológico de rebeldía contra la Pax romana que fue más allá del mero furtivismo naval. Los piratas aniquilados en tres grandes campañas por Pompeyo, César,-que llegó a ser su prisionero-, y Octavio, no sólo amenazaban el comercio, si no la unidad de poder del Mediterráneo. Eran residuos del mundo helenístico, mucho más atomizado. En todo caso, hay una anécdota interesante, sea o no cierta; Alejandro está ahorcando a un pirata. Le pregunta por qué lo era. El reo contestó; “por tener un barco. Si tuviese cien sería almirante”.

Del s. XVI al XVIII, no sólo el Caribe como vulgarmente se cree, si no todos los mares, sobre todo el Atlántico y el Índico, (en Asia y Oceanía siempre ha habido piratería-de hecho en Malasia e Indonesia sigue en completo vigor-, pero formaba parte integrada de las economías e imperialismos chino y musulmán, no de la rebelión contra estos). Precisamente en las costas africanas se dieron las actividades más interesantes desde el punto de vista del matiz ideológico que nos proponemos descubrir.

La Pax Hispana en el Atlántico también se vio socavada. En el siglo XVII, el comercio ibérico con América, y especialmente en el Caribe, tuvo un gran enemigo que no fue Francia, Inglaterra u Holanda sino la "Cofradía de los Hermanos de la Costa", compuesta por hombres de muy diverso origen, aunque principalmente Gran Bretaña, a quienes se conocerá como "filibusteros" - del holandes "vrij bouiter", "el que va a capturar botin" -, que en inglés será "freebooter" y en francés "filibustier". El término bucanero procede de “boucan” o “bucán”, que no es francés como generalmente se cree, si no indígena caribeño, como tantas otras palabras de uso marino como hamaca, tiburón…, se trata de carne ahumada y conservada. En las islas había ganado suelto y asilvestrado para que marinos y naúfragos se proveyeran. Una de ellas era la Isla de la Tortuga, ejemplar república a los efectos que hoy nos interesan.

La palabra corsario procede de la “patente de corso”. Nada que ver con Córcega si no con un contrato de para correr los mares atacando barcos de bandera enemiga, nunca la propia, aunque fuese un buque equipado privadamente, no de la armada. Hasta la llegada de los grandes navío de línea de muchos puentes y cañones, no había gran diferencia entre unos y otros. Pirata procede del griego, significa “el que emprende”, el que toma un camino. Con eso creo que agotamos las diversas denominaciones.

Desertores, bandidos, desclasados, herejes, rebeldes… en el Caribe. La mayoría de ellos se establece en la costa norte de Haití y de la isla de la Tortuga. La Tortuga era su principal base; allí compraban municiones; cuchillos, hachas y todos los demás pertrechos. Cuando divisaban por ejemplo un contrabandista danés que se dirigía al paso entre la isla de Cuba y Haití, salían a su encuentro en pequeños bergantines, (bergante significa furtivo y camorrista), para vender su carne ahumada a buen precio, (como en el caso de los vikingos, la piratería nunca aparece perfectamente separada de lo comercial), y los barcos ingleses y franceses fondeaban cerca de sus bases para comprar provisiones en su viaje de regreso a casa. La mayoría de los bucaneros eran franceses o ingleses, pero también había entre ellos indios campeches, esclavos negros evadidos; cimarrones, muchos holandeses, e incluso irlandeses. Algunos eran hombres honrados - exiliados por cuestiones religiosas, náufragos, y pequeños terratenientes expulsados de Barbados y de otras islas de la zona por los grandes cultivadores de azúcar. Otros eran piratas, criminales, desertores y demás gente de mal vivir. Sin embargo, aunque hubiesen sido tan honrados como el que más, los españoles nunca los habrían aceptado como vecinos en islas de su soberanía teórica. Con más éxito político los ex-esclavos de Haití que los mestizos de Riel en Canadá, esos intentos de libertad, por sangrientos que resulten, tienen siempre un matiz romántico. Nada más romántico que el poema de Espronceda cuyas primeras estrofas se saben casi todos los españolas de memoria. “Bajel pirata que llaman por su bravura “El Temido”……es mi dios la Libertad, ...mi única patria, la mar.” Yo particularmente prefiero, del autor El cosaco, pero ha tenido mucho menos éxito que el anterior.

Si el Imperio Español representaba una prolongación del ideal medieval de Sacro Imperio y “Civitas Dei”, la Hermandad de la Costa era la contraparte, y las calaveras y huesos, sobre negro o sobre rojo de sus banderas, representaban la revolución “avant la lettre”.
__________________
Los políticos y los pañales se han de cambiar a menudo... y por los mismos motivos.
(George Bernard Shaw)
Citar y responder
5 Cofrades agradecieron a DUDU este mensaje:
claudiepe (11-02-2014), genoves (11-02-2014), iMystic (12-02-2014), iperkeno (12-02-2014), Tiberio (13-02-2014)
 

Greatblue360

Herramientas
Estilo

Reglas del foro
No puedes crear discusiones
No puedes responder a mensajes
No puedes editar tus adjuntos
No puedes editar tus mensajes

BB code está activado
Emoticonos está activado
El código [IMG] está activado
El código HTML está desactivado
Ir a


Todas las horas son GMT +1. La hora es 23:02.


Powered by vBulletin® Version 3.7.0
Copyright ©2000 - 2025, Jelsoft Enterprises Ltd.
© La Taberna del Puerto