Antes de empezar, habréis de permitidme...... Tabernero!!, poned una ronda


de lo que gusten a las buenas gentes aquí presentes..............Y después de remojar el gaznate

, un brindis

, y al grano.
Habiendo estado asomado a la puerta de este antro por una larga temporada, en silencio, siendo testigo de unas cuantas refriegas y de ver pasar por la quilla a mas de un incauto novato, y no queriendo yo incurrir en tamaña alevosía, después de dar cuenta leída, de las normas, reglas y usos de esta venerable cofradía, por fin me decido a entrar, y con prudencia me hago un hueco, de la barra, en una esquina, y entre tanta gente curtida, corsaria y de piratería, con las copas llenas me presento, y de paso cuento, que en saber, aportar poco os puedo, y mucho llevo aprendido ya; localizar me podéis, y en lo que buenamente pueda, a vuestro servicio me tenéis, en la Costa que, al Oeste, llaman de la Muerte (pero que suena con mejor porte al llamarla Costa da Morte).
Si de etiquetas es cuestión, sin que por ello ponga yo objeción, en el gran clan me inscribiréis de la Liga de los Sin Barco, aunque voluntad tengo de hacer leva y armar balandro, en breve, pero no en el acto. Obtuve el PER hace dos años, navego cuando me dejan, cuando puedo, y cuando me llevan, que no es mucho,... y en cualquier puesto, aunque por navegar, con tiento y contento, labores de lastre realizo presto.
Finalmente, y con la bolsa llena de piezas de a ocho (aquí un loro debería repetir “piezas de a ocho, piezas de a ocho”), permitidme que esta ronda

, y las siguientes, a mi cuenta vayan, pues hasta que la vertical se torne horizontal o la paciencia del tabernero esté a su fin tocar, servíos a tomar, y que corra sin parar, ron del bueno para la tropa, lo que guste el tabernero, a Panxut Cardhú con hielo y para mi por favor, ginebra de las indias con sheltz y lima.


