La Taberna del Puerto Social
"Se navega por los astros, por la mar, por la tierra, por las gentes, por los sentimientos...Se navega." Altair
VHF: Canal 77
Regresar   La Taberna del Puerto > Foro > Foros Náuticos > Foro Náutico Deportivo

Avisos

 
 
Herramientas Estilo
  #1  
Antiguo 02-06-2008, 08:34
Avatar de Capitán Barceló
Capitán Barceló Capitán Barceló esta desconectado
Corsario
 
Registrado: 29-11-2007
Localización: Baleares.
Edad: 54
Mensajes: 1,104
Agradecimientos que ha otorgado: 411
Recibió 300 Agradecimientos en 114 Mensajes
Sexo:
Predeterminado Narciso Monturiol, inventor del submarino.

Cofrades.

Hace un año pasé varios días en Cadaqués, donde estuvo viviendo Narciso Monturio, el inventor del submarino. Maravillosa población que tanta fama ganó con Salvador Dalí. Bien, al grano. Pasé por la casita done estuvo viviendo el bueno de Narciso y resultó conmovedor comprobar cómo la historia olvida a los grandes y festeja y celebra a los pequeños y mediocres. Un ejemplo, ¿cuánta gente conoce con pelos y señales el famoso duelo de pistoleros de OK Corral, que no pasó de ser un tiroteo en un callejón polvoriento y desconoce la hazaña de Monturiol?

Gracias cofrade Planeta Agua, por la noticia del nuevo Ictíneo.

He aquí mi particular homenaje al inventor catalán. (de la página de wikipedia)

"Narciso Monturiol Estarriol (Figueras, Gerona, España, 28 de septiembre de 1819San Martín de Provensals, Barcelona, España, 6 de septiembre de 1885) intentó, sin éxito, resolver el problema de la navegación submarina. Construyendo el Ictíneo I, propulsado por la acción de dos personas, no alcanzaba la potencia necesaria para contrarrestar las corrientes marinas (no superaba los dos nudos). A pesar del fracaso, Monturiol no se desalentó y construyó una segunda versión; el Ictíneo II, para el que originalmente amplió la fuerza motriz añadiendo seis personas más. Pero los resultados fueron incluso peores. En un último intento, trató de incorporar una caldera de vapor, para reemplazar a la fuerza humana. Pero en las pruebas realizadas en el dique se observó que las temperaturas alcanzadas en el interior del buque (mayores de 50 grados centígrados), hacían imposible la habitabilidad de la tripulación. Dando por fracasadas definitivamente las experiencias, los acreedores de la sociedad propietaria de la empresa, procedieron al embargo de todas las propiedades, incluido el prototipo Ictíneo II, que fue vendido como chatarra. Sin embargo, sí logró algo. Solventó el problema de crear oxígeno dentro de un compartimento submarino, un proyecto que fue rescatado por los nazis en la II Guerra Mundial y totalmente perfeccionado por el USS Nautilus, el primer submarino nuclear.

Hijo de un fabricante de botas, Monturiol estudió en Cervera y se licenció en derecho en 1845 aunque nunca llegó a ejercer su carrera.

Retrato de Monturiol


Su amistad con Abdón Terrades le llevó a afiliarse al Partido Republicano y a simpatizar con las ideas socialistas de Étienne Cabet. Dio su apoyo a la participación catalana a la comunidad utópica Icària y Nova Icària y tuvo que exiliarse en 1848 a Perpiñán y Agen, en Francia a causa de su ideología política.
A su regreso a España, aprendió el oficio de impresor y monto su propia imprenta en la que editó El padre de familia (1846) y La Fraternidad (1847-48), primer periódico de ideología comunista de España.
Una estancia en Cadaqués le permitió observar la tarea peligrosa de los recolectores de coral. Esto le llevó a pensar sobre la navegación submarina y, a su regreso a Barcelona en septiembre de 1857, organizó la primera sociedad comercial de España dedicada a la exploración de la navegación submarina bajo el nombre de Monturiol, Font, Altadill y Cia. con un capital de 100.000 pesetas.
En 1858 presenta su proyecto con una tesis titulada el Ictíneo o la nave-pez. Las primeras experiencias de inmersión del Ictíneo I tuvieron lugar en el mes de septiembre de 1859 en el puerto de Barcelona.
En 1873 fue nombrado director de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre de Madrid en 1873. En este mismo año fue elegido diputado en las Cortes.
A causa de la baja rentabilidad de sus inventos, empobreció y murió sin ningún reconocimiento.
En 1917 el gobierno español adquirió un submarino italiano y le llamó Monturiol.
En reconocimiento a sus méritos, existen calles con su nombre en ciudades tales como Barcelona, Girona y Zaragoza. Asímismo existe un I.E.S. con el mismo nombre.

El Ictíneo I media siete metros de largo, 2,5 de ancho y 3,5 de fondo y estaba pensado para facilitar la pesca del coral. El casco interior era esférico y tenía una capacidad de 7 metros cúbicos; el casco exterior tenía forma de pez con una sección elíptica inspirada en el prototipo de Wilhelm Bauer que navegó en 1851. Entre el casco interior y el exterior había unos tanques de flotación, un tanque que suministraba oxígeno para la respiración y la iluminación y un tanque de hidrógeno que alimentaba una lámpara para iluminar las profundidades marinas. El Ictíneo I se propulsaba con un propulsor de aleta accionado por una tripulación de dos hombres.

Planos


La inmersión se conseguía mediante una hélice horizontal que podía dar vueltas en ambos sentidos y bombas de densidad y aire con la finalidad de asegurar la estabilidad y la flotación. El Ictíneo I estaba equipado con una serie de herramientas específicas para la pesca del coral.
El fracaso inicial, al no poder sustraerse a las fuerzas de las corrientes marinas, lo que hacía imposible la navegación en inmersión del buque, no desalentaron al esforzado proyectista. Monturiol escribió una carta a la nación, animando a una suscripción popular que llegó a reunir 300.000 pesetas aportadas por ciudadanos anónimos tanto de España como de Cuba.
Con este capital se constituyó la empresa La Navegación Submarina con el objetivo de desarrollar el Ictíneo II.

Ictíneo II [editar]

El Ictíneo II de mayor tamaño que su predecesor, inicialmente pretendía alcanzar una potencia suficiente añadiendo mayor número de tripulantes-propulsores, resultando por desgracia más lento. Por lo que se planteó la posibilidad de incorporar una nueva fuente propulsora: una caldera de vapor. El Ictíneo II medía 14 metros de largo, 2 metros de ancho y 3 de fondo. Fue construido con madera de olivo y refuerzos de roble con una capa de 2 milímetros de cobre. En la parte superior tenía una cubierta de 1,3 metros de ancho, con tres ojos de buey con cristales de 10 centímetros de espesor. Desde la torreta se controlaba el timón mediante un engranaje sin fin.
Cuatro compartimientos estancos de 8 metros cúbicos estaban repartidos de forma simétrica a los lados, garantizando la flotabilidad al estar vacíos. Estos compartimientos podían ser inundados a voluntad con tal de sumergirse mediante una bomba. Mediante un peso que se desplazaba longitudinalmente a través de un raíl se intentaba mantener la horizontalidad durante la navegación submarina. Este mecanismo estaba controlado por el timonel. La embarcación tenía un mecanismo de escape que permitía soltar lastre y emerger a la superficie en caso de emergencia.
Ante el fracaso inicial de la propulsión humana encargó a su yerno el diseño de una caldera de vapor adecuada a la utilización en una embarcación cerrada herméticamente. El motor utilizaba un compuesto químico de magnesio, peróxido, cinc y clorato potásico que reaccionaba generando la temperatura necesaria para la producción del vapor y que producía un gas, oxígeno, que era recogido en tanques y, posteriormente, utilizado para la respiración de la tripulación y para la iluminación interior. A las dificultades iniciales para poder montarla en un buque que no estaba originalmente deiseñado para incorporar este nuevo elemento, hay que añadir el fracaso rotundo de las experiencias realizadas en el dique, antes de su ensayo en el mar, ya que las temperaturas alcanzadas y la humedad en el interior de la embarcación hacían de todo punto imposible la habitabilidad de la tripulación. Considerando el equipo y los socios de Monturiol definitivamente fracasadas la experiencias, lo que el proyectista nunca asumió, se procedió al embargo de la sociedad. El Ictíneo II se vendió como chatarra en 1868. Hoy en día se puede ver una réplica de esta embarcación en el puerto de Barcelona.
Otros inventos de Monturiol incluyen un proceso para incrementar la velocidad de producción de papel adhesivo que aplicó a su trabajo en la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre."

Mis respetos.

a vuestra salud.
Citar y responder
Los siguientes cofrades agradecieron este mensaje a Capitán Barceló
 

Social


Reglas del foro
No puedes crear discusiones
No puedes responder a mensajes
No puedes editar tus adjuntos
No puedes editar tus mensajes

BB code está activado
Emoticonos está activado
El código [IMG] está activado
El código HTML está desactivado
Ir a


Todas las horas son GMT +1. La hora es 02:27.


Powered by vBulletin® Version 3.7.0
Copyright ©2000 - 2024, Jelsoft Enterprises Ltd.
© La Taberna del Puerto