-Otra- Singladura veraniega: Hyères, Côte d’Azur, et Golfe du Lion

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Heme aquí, como cada año, dispuesto a daros el latazo con un pequeño resumen de nuestro diario de bitácora y fotografías de nuestras singladuras vacacionales. Voy a ir colgando a ratos sueltos… así que ya me perdonaréis las tardanzas…

Ruta:
Este año el destino ha sido el sur de Francia.
Partiendo de nuestro puerto base, en Masnou, salimos con la intención de cruzar el golfo de león –si la tramontana/mistral lo permiten- con rumbo directo a islas Hyères. Una vez allí, el plan consiste en conocer la zona durante unos días, para ir volviendo costeando hacia el oeste primero y sur después. Disponemos de tres semanas a partir del 28 de julio.

Este es más o menos el recorrido que hicimos:


Tripu-Fichajes:
Durante los primeros cuatro-cinco días mi hermano ha aceptado la invitación para sumarse a la tripu habitual (almiranta y yo). Luego se volverá en tren. No sabe nada de náutica.... pero cocina como pocos!!!! Qué gran fichaje!!!! jeje

Bautista: Un golpe de suerte. Una vez más, manolo, nuestro piloto automático, amenazaba con hacernos trabajar al timón permanentemente, a pesar es haber dedicado casi dos meses de desvelos y apaños a intentar repararlo: engrases, cambio de correa, calibrado.... La semana antes de salir, decidió que no le apetecía acompañarnos sin chirriar como un poseso... desesperante.
La noche antes de nuestra salida, con el barco ya estibado y de vuelta al pantalán después de cenar, nos encontramos con dos cofrades amigos y comentamos nuestras desgracias con los pilotos –compartimos modelo de piloto y penas-. Para mi suerte, el colega ha encargado ya un piloto nuevo, y me ofrece las piezas del suyo de recambio. Por la mañana, dos horas de brico en el motorcillo, cambio de rueda, mezcla de engranajes, y aparece él: Bautista!!!!! Discreto, silencioso, trabajador, incansable. El piloto que todo navegante sueña!!!!! (gracias Alfredo y Luís!!!!)

Otros fichajes y mejoras:
El casco limpio e impecable, después del tratamiento antiósmosis invernal, y la hélice plegable también de este año hacen andar a vela a nuestro Xiroi como nunca!!!. A cambio, a motor, el barco anda algo menos (antes llevaba una tres palas fija) y por el mismo motivo, consume también algo menos (1,40 ltrs/hora).
Como siempre que salimos de travesía, paso los tres rizos a la mayor, y, este año, además, estreno una nueva retenida que funcionará de maravilla.

Masnou – Costa Brava.
Habrá que tener paciencia y esperar a que el famoso león del golfo duerma para afrontar la travesía sin sufrir. Para hoy, el parte da F7. Toca esperar. Como además, con el tema del piloto, salimos algo tarde, decidimos pasar la primera noche fondeados en Sant Pol, unas pocas millas al sur de Palamós.
Fondeamos al sur de la cala, sobre 6 mtrs de arena. Por la noche, fondea a nuestra popa un mega-catamarán, con una docena larga de ocupantes y la música a todo trapo. No es nuestro concepto de “primer fondeo de vacaciones” y dedicimos levantar nuestra ancla e irnos al centro de la cala, más al norte.

Por la mañana, sobre las 6h, me despiertan unos golpes en el casco (bueno, despiertan a la almiranta... y ella a mi... jeje). Saco la cabeza –asustado pensando que hemos garreado- y sorpresa: Una motora de unos 6 mts suavemente abarloada a nuestro barco. En principio, no se ve a nadie a bordo. Su ancla ha enganchado nuestra cadena y eso ha detenido su garreada provocada por el terral que ya sopla.
Al poco, aparece la cara somnolienta del armador, que estaba dulcemente dormido dentro. Se asusta: “Pero si yo estaba fondeado allí, leyendo!!!”, dice señalando las pequeñas motoras frente a la playa, unos 200 mts hacia la costa... Libramos su ancla, se disculpa, y vuelve a ocupar su zona de fondeo inicial. Buf!

Sant Pol - Rosas
Aprovecho para darme el primer baño matutino –cómo me gusta esta hora!!!-, y después del desayuno, salimos hacia el norte, con el parte de tramuntana F6 en mente...

Efectivamente, a la altura de Cap Sant Sebastià ya estamos con 20-25 nudos en la nariz. Remontamos tranquilamente, disfrutando –y un poco añorando- esta costa. A primera hora de la tarde ya hemos atravesado el golfo de Rosas, y el falso garbí nos hace pensar que la tramuntana ha calmado.
Cuando sacamos la cabeza por Cap Norfeu nos damos cuenta que solo se trata de un efecto térmico de la bahía, y que fuera, como decía el parte, la tramuntana sopla con ganas.
Decidimos ir al puerto de Rosas. Nos dan amarre. 46 €. Hay muchos barcos franceses, imagino que como nosotros, esperando que el león se duerma.
Damos una vuelta por Rosas y cenamos en un restaurante donde somos los únicos que hablamos español.... incluyendo dueños y camareros!!!
De vuelta al barco, necesitamos un tratamiento a base de “ronsito” para recordarnos que no somos “turistas de toalla” sino “rudos navegantes”.

Cadaqués
Salimos de Rosas con la idea de ir a buscar un fondeo resguardado de la tramuntana, incluso si podemos, intentar pasar Cap de Creus para acercarnos hasta Port de la Selva o incluso Port Vendres.
Una vez más, cuando asomamos la nariz por Cap Norfeu los 35-40 nudos de tramuntana y la marejada que ya hay nos hace desistir. Decidimos meternos en la bahía de Cadaqués.

No sé si se verá, pero en la fotografía se aprecia la diferencia entre zona protegida por Cap Norfeu y la zona desprotegida, con los borreguitos al fondo:



Llamamos por radio, para pedir permiso para usar una de las boyas del “Nàutic”. Salen con la zodiac y nos asignan una.... por 36 € ¡!!! Además, si queremos ser llevados a tierra por ellos, pretenden cobrarnos 15 € más!!!!
Nos quedamos solamente porque a todos nos apetece visitar Cadaqués de nuevo. Me acompaña un ex-residente y la promesa de visitar personas y restaurantes conocidos nos hace olvidar el atraco. Mientras, la tramuntana sopla con ganas sus buenos 35-40 nudos durante todo el día, y levanta mar rizada incluso dentro de la bahía:





La visita a Cadaqués, con buena cena y luna llena incluida no nos defraudan.

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Travesía a Hyéres
Aunque el parte no es todavía muy claro, sí parece que la tramuntana da signos de apaciguarse. Salimos temprano. Buen viento restante a un descuartelar y algo de mar de fondo nos permiten navegar a vela a unos 6” casi hasta la noche.

A media tarde nos sobrevuela una avioneta pequeña. Para nuestra sorpresa, después de la primera pasada da la vuelta para hacer dos pasadas más a una altura que no supera los 30 mts. Vemos hasta la cara y vestiduras del piloto. Qué querran? No sabemos si preocuparnos o solo sorprendernos...

Ahí viene!


Realmente bajo:


Al final del día el viento baja y tenemos que arrancar la batidora para hacer unos tristes 4,5 nudos. Lo compruebo, y confirmamos que andamos contra una corriente de 1,5 nudos que nos acompañará hasta entrada la noche.
Seguimos con la buena gastronomía a bordo y, a pesar de estar en travesía, tenemos cena de cuchillo y tenedor.

Establecemos los turnos de guardia para la noche –de hecho, como siempre, de día también hay siempre uno de nosotros de guardia para permitir al resto descansar sin sobresaltos.
La noche es tranquila. El mar poco a poco va quedando como un espejo y tenemos luna casi llena. Solo ha habido que maniobrar a un carguero pequeño cuando hemos cruzado la ruta de Marsella, y que teníamos posicionado en el radar con mucha antelación.
Esta vez, los delfines aparecen solo fugazmente. De hecho, con la mar plana, y sus apariciones fugaces, llegan casi a asustarnos en ocasiones.

De hecho, el mar tan plano casi asusta:





Hyéres - Porqueroles
Llegamos a Porqueroles –la mayor de las Hyères- a mediodía del dia 1 de agosto. Ya de entrada, me sorprende la cantidad de barcos –motoras, barcos de centros de inmersión, y sobre todo veleros- que vemos navegando por la zona. Me digo que hemos llegado a una pequeña “meca” náutica. Me acuerdo de las palabras de un cofrade cuando me contaba cómo había aprendido a navegar en estas aguas: “Allí la gente navega...”. Viendo el bullicio de barcos arriba y abajo le comprendo.

Vista del “petite passe”, con algunos spi’s al fondo:


Entramos en el puerto de Porqueroles. En la misma bocana hay un marinero con una zodiac dirigiendo el tráfico:
- “Tienes amarre?”
- “No. Hay? Como lo consigo?”
- “Mete tu barco en el muelle de espera flotante y ve a capitania a pedirlo”.
(os ahorro las repeticiones debidas a mis “francés-de-diez-horas-intensivas”)

Todo perfectamente organizado.
En capitanía nos asignan un amarre, nos lo señalan en un mapa del puerto y nos cobran los 28 €. En la factura, aparece la “cuenta del abonado” que va a cobrar parte de mi pago por usar el amarre que él dejó libre. Empiezo a constatar diferencias con nuestros puertos:
Los precios –como veréis- son muy distintos. En caso de dejar su amarre vacante, deben avisarlo a capitanía, pero luego recuperan algo de lo que el puerto cobra por esa plaza.
Una vez tengo la plaza asignada, puedo salir a navegar de nuevo hasta las 19h. A partir de ese momento, ocuparan mi plaza si no estoy en ella.
Nunca hay marineros ayudando en las maniobras, pero casi siempre hay alguien recibiéndote y dándote indicaciones cuando entras a un puerto en busca de amarre.
De hecho, en ninguno de los puertos que entramos tuvimos problemas para encontrar amarre.... hasta nuestra vuelta a España.

Otra diferencia: Los pantalanes son realmente más parecidos a campings que a pantalanes de puerto: familias enteras –con perro y suegra- en barcos de 8 mts,, gente comiendo en el barco, haciendo la colada o lavando platos...

Vida de pantalán:




Y alguna perla del pantalán, con marinero incluido:


Comemos y sesteamos hasta la tarde.
Salimos a visitar la isla a pie. Sorprende la cantidad de chicharras ruidosas que se oyen por todas partes. Paisajes de pinos, y rutas señalizadas para excursiones alrededor de la isla.
Casi ningún vehículo de motor, y vida tranquila.
En cierto modo, me recuerda algo Tabarca, con sus ferrys de visitantes diurnos, restaurantes... Cenamos en uno de ellos la especialidad típica: “moules frittes” pero “avec roquefort”... (raro, raro...., aunque nostamal....)





Vista del puerto de Porqueroles, con el “continente” al fondo:


.... mañana sigo...

[Comodoro]

Sigue sigue magic!!

Un abrzo.

[ROyOR]

Muchas gracias por el relato y las fotos. Espero que sigas contando mas de la travesía.

[Mik21]

[ Felicidades por vuestra travesía y vuestro relato..

Me encanta los relatos-crónica con información de verdad... puertos.. formas...trato ...precio..., planos y fotos... y también los problemas e incidencias naúticas y administrativas de la singladura... y como ¿se resolvieron?.

Eso si es comparti y ayudar ... al que venga detrás.

Lo dicho. Excelente relato. Mi más viva gratitud.

[Tumbao]

Felicidades... que gustazo de lectura, voy a llegar tarde al curro !!

[deigloria]

Gracias Magic por tu relato, sigue, sigue que engancha...

Buen viento

[De la Rocha]

Hola Magi, me alegro de verte por aqui, ya veo que sigues con las prospecciones geograficas

espero con atencion tus proximos capitulos, estos hilos son buenisimos, es como una buena novela, pero, encima conoces a los protas

por cierto, te hizo algo la motora

un abrazo cuidate mucho y dale un fuerte beso a la capitana

[Solera-jcoc]

Todos estos hilos son una gozada y se agradecen; especialmente cuando, como es el caso, se sabe escribir y transmitir.

[efernbu]

Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más Más

[Butxeta]

Que bién, así es fácil luego, solo nos queda seguir vuestros pasos.

[Río CINCA]

Gracias “magicus max”

Es digno de colocar en algún blog, tipo La Bitácora, para que no se pierda.

Si te decides avisa para visitarte.

[Ligure]

Muy bueno,

Gracias por compartirlo, pero sigue con ello que me interesa. Es uno de mis objetivos para el próximo año.
Éste, o el de Cerdeña como el cofrade Butxeta.

[Wandyta]

Estupendo Max !!! Tenías razón cuando decías que vuestro viaje se complementaría con el nuestro, estais haciendo toda la zona que nosotros dejamos arriba sin más tiempo para nada, y es un privilegio poder leerlo ahora desde aqui

Ya habeis visto como sopla el león eh ?? no me extraña que alli se aprenda rápido a navegar

Ah y no probaste las "moules" con salsa curri ?? suena más raro que el roquefort pero están divinasssssssssss

Me quedo a la espera de seguir el relato y de ver más foticos

[rom]

Guapamente, magicus maximus magnificus!!!!



No se podía esperar menos de tí ;-))


Moltes gràcies !!!

[machio]

precioso
pero nos habeis dejado con la miel en los labios
unas copas por vosotrs

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Hyeres

Hoy dedicaremos el día a dar la vuelta a las islas Hyeres, en sentido antihorario, dejándolas siempre por nuestro babor, eso sí, después de disfrutar del primer desayuno proviniente de la “boulangerie” del puerto, mmmm!!!!

Comentar que el archipiélago de Hyeres está formado por cuatro islas principales. La de Porqueroles, la de más al oeste, vendría a ser la “capital” y está separada del continente por el “petit passe”, de menos de una milla. Separadas de ésta última por el “grande passe” (de unas 5 millas), encontramos de W a E la Ile du Bagaud, Ile de Port Cross, i Ile du Levant. Como se trata de un parque natural, existen algunas restricciones que conviene conocer antes de moverse por la zona.



Como venimos de hacer una travesía comparativamente larga, dar la vuelta a las islas me parece un paseo y hago los cálculos “a mano alzada”. Si tenemos en cuenta además, que la zona al sur de la “Ille du Levant” es de navegación restringida por uso militar, acabaremos haciendo una navegada mucho más larga de lo que inicialmente pensábamos. Lo que parecía un día de “navegada contemplativa” acabará resultando una navegada de 40 millas. Nada del merecido descanso que pensábamos tener…

De todas formas, disfrutamos de los paisajes y de las formas singulares de sus piedras. Oímos el sonido de las chicharras incluso desde el mar. Durante la tarde, además, se suma a la navegada la entrada de un buen viento –que tuvimos cada día de los que estuvimos por allí- que, en la zona protegida entre las islas y la costa no levanta mar y nos permite navegar tranquilamente con 20 nudos y todo el trapo arriba. Una gozada!

Nos vamos:
Estremo oeste de Porqueroles, con el faro en primer término, el Fort en medio, y la Baie du Langoustier al fondo (un buen fondeo):



Faro sur de Porqueroles, muy concurrido por caminantes:


Belleza, dirigiéndose al Grande Passe:


Algunas imágenes más del sur de Porqueroles


Ile de Port Cross:


Ile du Levant, sur, zona militar, hay de dejar unas 2 millas de la costa, a riesgo de ser usado de "blanco de prácticas militares":


Buque militar abandonado, en Ile du Levant. Detrás está la base:


Me gusta este paisaje:




Las señalizaciones solían ser excelentes.


Remontando hacia el oeste, con buen viento, Formación curiosa, con Porqueroles al fondo:




A media tarde fondeamos en la Anse Du Bon Renaud, una pequeña bahía al oeste de Porqueroles. Queremos estar cerca de Hyères (la ciudad costera) porque de madrugada tenemos que llevar a nuestro tercer tripulante a tierra para que pueda volver en tren.
Fondeamos sobre 4 mts de arena, con una densidad que me incomoda un poco (queremos salir de noche) y decido quedarme en la parte más exterior del grupo. No sé si esta es también otra diferencia en las costumbres de navegación aquí, pero las distancias entre los barcos fondeados se me antojan extremadamente cortas. No quiero ni pensar qué ocurriría si de noche entrara un buen mistral súbitamente.



Hacemos una buena cena para despedir a mi hermano, y la bodega del Xiroi nos obsequia con un buen somontano.

- Viendo las pruebas me doy cuenta de que no acabo de tomar la medida buena a las fotografías. Disculpas-

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Ruben -un abrazo para vosotros también-:
No, la motora era ligera y había poco viento. Dió solo dos toques para despertarnos y poner defensas. Hubo suerte.

Wandyta:
No solo probamos los moules avec curry... creo que probamos todas las especialidades posibles (rebozados, con ajoli,.... mmmm).
Lo del León... pues ya llevamos jugando con él algunos agostos.... De hecho, creo que el agosto pasado fue mucho peor que éste...

Gracias a todos por vuestros ánimos, y disculpad la caos en el formato fotográfico.... No consigo dominar los formatos de ImageShock....

Sigo al tajo...

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Hyeres – Cavalaire-Sur-Mer

Levantamos el fondeo a las 4h de la madrugada. Navegamos algo más de una hora –incluso a esta hora hay tráfico-, y nos abarloamos a la gasolinera del puerto sur de Hyeres, de los dos que hay, en la costa francesa. Despedimos a mi hermano, y nos quedamos descansando a esperar que abran la gasolinera para llenar de nuevo. Existe un sistema de autoservicio con tarjeta de crédito, pero nuestras tarjetas no parecen funcionar y esperamos.

Estamos algo cansados y decidimos –hoy sí- navegar contemplativamente hasta pasar cabo Cavalaire y ver si fondeamos o entramos en el puerto de Cavalaire-Sur-Mer, en función de las condiciones.
Cuando salimos de la gasolinera y del puerto, nos sorprende ver que la noche tranquila ha dado paso a un viento (termico?) de unos 30 nudos. Me había dado tiempo solamente a izar la mayor y sacando solo una punta de génova para equilibrarnos, vamos a 7,2 con el viento al largo (NE).

El viento está hoy loco. Tan pronto como salimos de la bahía de Hyeres, fuera de Cap Benat, el viento rola al W, y se refuerza hasta los 35 nudos. Me desperezo y pongo dos rizos en la mayor; saco algo más el génova para recibir el viento esta vez en la aleta de er. Seguimos lanzados.

Finalmente, cuando doblamos el cabo Cavalaire, tenemos una última rolada al NW que nos permite hacer el último tramo con el viento al través, por babor.
Una vez más, lo que debía ser un día tranquilo, ha sido una cabalgada de 25 millas, eso sí, con mar llana.

De los dos puertos que hay en Cavalaire, el del E es privado, por tanto entramos en el del W más al interior. Nos recibe un marinero desde la torre de capitanía hablándonos por megafonía (onyo, esto es nuevo!!!). En realidad, la situación no deja de ser algo cómica: mi comprensión del francés, transmitido por la megafonía es .... discreta (y soy muy generoso). A su vez, el marinero no consigue oír mis respuestas a grito pelado (yo no tengo megáfono, claro)....
Al final, la rutina habitual: amarramos en el “accueil”, pagamos los 30 €, y nos dan un amarre en el interior del puerto, al lado de un queche de madera que nos hace babear un rato...
Puede que sea solo una impresión, pero este puerto se me antoja un poco menos “camping” y más “pijo” que los anteriores.... será que nos acercamos a St Tropez???

Pasaremos el resto del día –hoy sí- descansando y paseando por este pequeño pueblo turístico y sus paraditas: mercadillos, músicos, magos, pintores, retratistas...... ,

Fotos del día…
Alguien conoce este barco? tenía bandera española:



En la entrada del puerto de Cavalaire encontramos este artefacto…. Todavía no tengo claro si era un submarino o un “visión de fondos marinos”:



Vista de los dos puertos. En primer plano, el “publico”:



Al norte de la bocana hay una zona de fondeo controlado por el mismo puerto:



... sigo luego.... creo que ya tengo a la rana controlada...

[-ja-]

Hola pareja me alegro de que todo haya ido bien
nos vemos

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St Tropez

Por la mañana aprovisionamos el barco de nuevo con comida fresca y pan del día y salimos sin prisa en dirección E.
Hoy la brisa es suave, y en principio, navegamos tranquilamente a vela haciendo de 3 a 4 nudos, una delicia.

A medida que nos vamos acercando a Cap Camarat y sus rocas, ya en la zona de influencia de St Tropez, bahía Pampelonne, la cantidad de motoras que pasan por todos lados aumenta hasta hacer la navegación a vela desesperante y de hecho, imposible, con sus estelas.
Fondeamos para comer en Pampelonne. Se nos antoja idéntica a la Cala di Volpe, que ya visitamos el año pasado en Cerdeña. Motoras inhumanas, con auxiliares repletas de marineros fornidos que –en algunos casos- parecen acercarse a ver quien son los del “velerucho este”... Más tarde creo comprender qué ocurre: asistimos a una persecución entre un avión y una mega motora, en los que imaginamos paparazzis i famosos jugando al escondite. De hecho más adelante veremos un helicóptero con publicidad adherida para ser usado para fotógrafos (flypictures.com, creo recordar)

Faro de Cap Camarat, otro más para la colección:



Otra vez nos persiguen aviones:



No, parece que esta vez los perseguidos son otros:



Fondeo de unos tractorcillos en cala Panpelonne:



Este nos pareció muy singular, puede que alguien lo conozca



Claro que, en medio de tanta ostentación, también encontramos gente modesta como nosotros



Por la tarde levantamos el fondeo y seguimos navegando a motor (las estelas ya son permanentes y mi paciencia para soportarlas se ha agotado) hasta la Anse des Canebiers, una milla al este de St Tropez, donde decidimos fondear para pasar la noche, en busca de un pequeño remanso de paz. Hay algunos barcos fondeados, pero nada que ver con la densidad que hemos visto en Panpellone ni con la que veremos mañana en la misma bahia de Sant Tropez.
Disfrutamos de los placeres de un buen fondeo: baño, observación de otros barcos, y vida contemplativa...

bueno, por hoy ya basta....

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St Tropez - Baie du Rabat

Por la mañana nos acercamos a St Tropez. Visto desde el mar, podría llegar a ser un pueblo encantador... si no fuera por la intensidad (en calidad y cantidad) de tráfico marítimo que hay a su alrededor, que hace que desistamos de visitarlo por tierra y salgamos –casi huyendo-, ya en dirección W. Puede resultar curioso observarlo des de la distancia, pero, en el fondo, este sitio no es para mí, no me ha gustado…

Parte “coqueta” de St Tropez:





Algunas bellezas fondeadas frente al puerto:





Entrada del puerto



Y los inevitables paparazzi, de caza:



Corrijo: Estuve visitando su web… y sí son fotógrafos profesionales que venden reportajes a todo barco que quiera encargárselo….

Como era de esperar, a medida que nos alejamos del Cabo Lardier, van desapareciendo las motoras y sus malditas estelas (que me disculpen mis amigos tractoristas, pero esto colma la paciencia de cualquiera), y se hace posible navegar a vela.
A medida que nos acercamos a Hyéres de nuevo, el viento se establece del W y podemos navegar otra vez a vela con mar llana, en una fantástica ceñida.

Como siempre en esta zona, barcos navegando por todas partes…



Mirad qué pequeña maravilla:



Por la tarde saludamos y dejamos a nuestro través de nuevo las islas, pasamos el estrecho del Petit Passe e intentamos buscar un fondeo ya fuera de la zona de influencia de las islas.
Intentamos la baie du Niel”, pero parece demasiado abierto al W, y no me decido a intentar pasar la noche aquí.

Seguimos hasta la baie du Rabat. Cuando llegamos hay un solo velero fondeado, -un first23- que parte -a vela- al poco de llegar nosotros.
El tenedero es perfecto -7 mts de arena blanca- y a pesar de ser algo abierta al S, la protección nos parece suficiente para las condiciones que tenemos en el parte.

Realmente, lo que más me preocupa es que.... no hay nadie más en la cala!!!!. Y el sitio parece idílico!!! Estará prohibido el fondeo aquí? Hay algún parte local que desconozco?

Largo 40 mts de cadena y nuestro “anchor buddy” particular: el cinturón de plomos de buceo de 10 kg, engalgado después de los primeros 10 mts de cadena. Perfecto. Cuando el viento baja con el sol, me siento en el lugar ideal: arena blanca, playa casi desierta, y fondeo solitario.... (sssshhhhh..... no se lo contéis a nadie...!!!).

Tengo la sensación de estar en Menorca.... en enero.
No pude resistir la tentación de hacerle una fotografía a nuestro querido Xiroi solitario en la cala:

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Baie du Rabat – Cassis

Pasamos, efectivamente, una noche mágica, -a pesar de dormir con la alarma de gps y que me despierto espontáneamente para revisar el fondeo cada poco...
Baño matutino, café..... y levantamos el hierro, despidiéndonos definitivamente de la zona de Hyeres, y poniendo rumbo a Cassis y la zona de las Calanques.

Por al camino dejamos paisajes fantásticos, con paredes blancas colmadas de pinos verdes. Se me ocurre que aquí, sufren todavía poco las primeras escaseces de agua que sin embargo sí sufrimos en la península y baleares. Eso puede explicar que nos sorprenda el paisaje, por otro lado, tan parecido al nuestro –aunque más verde-. La zona cercana a Toulon, además, contiene instalaciones militares, y es por tanto, muy poco concurrida.



Las vacas nadan? Cosas vieres!!!:



Pasamos Cap Sicie, para seguir descubriendo bellas paredes y formaciones.



Decidimos dejamos atrás las Iles des Embiez, que dan entrada a la baie du Sanary, y que habrían podido tener un buen fondeo. En realidad, tenemos un parte de “mistralada” para dentro de dos días, y intentamos encajar los planes para que, si se confirma, nos pille ubicados en algún lugar en el que no nos importe pasar dos o tres días.
Pasamos también al lado de Cap de l’Aigle. Viendo la fotografía, no hace falta traducción, verdad? Impresionante pared, una vez más.





A primera hora de la tarde llegamos a la calanque de Miou. Paredes de calcáreo blanco, verticales sobre el mar. Plataformas que forman pequeñas playas de piedra donde la gente toma el sol “comme il faut”: en pelotas.
La calanque de Miou alberga un minúsculo puerto, y algunas boyas a las que hay que amarrar con un cabo a tierra. Como siempre, todo perfectamente ordenado y, esta vez sí, con la ayuda de un marinero que, desde la zodiac, aproxima los cabos a las anillas ubicadas en las paredes y perfectamente señalizadas con pintura.

Si, ahí dentro hay una cala:











Visitada la calanque, salimos en dirección a Cassís, (a una milla escasa) y después de esperar 10 minutos en la gasolinera, nos dan un amarre entre dos barcos de 14 mts. 27€. En capitanía, como siempre, encantadores.

Cassis aunque esté en estas fechas abarrotado de turismo local, merece también una visita y un paseo por sus calles estrechas del centro.

Nuestro vecino, en Cassis, no me preguntéis qué hacia aquí…:



Algunas vistas de alrededores y puerto

[Nonick]

Fichado para derroteros.

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Cassis – Marsella

Salimos con el parte que confirma la entrada de una buena mistralada para mañana. Decidimos pasarla en Marsella, que tiene suficientes encantos para entretenerlos durante los días que dure el mal parte.

Pasamos el día navegando (casi ratoneando) por esas pequeñas calanques y sus paredes blancas que caen a plomo sobre un fondo de 40 mts. Uno puede navegar tocando las paredes con la mano en esta zona. Pasan por nuestros ojos pequeñas maravillas en forma de calanque: D’en Vau, Morgiou, Sormiou,.. en cada una de ellas el tiempo podría detenerse con nosotros dentro por unos días... Compartimos la zona con algunos barcos de buceo y algunos pescadores. Qué maravilla de lugar!!!!







Calanque de Sormiou, la última de las que vimos:







Seguimos en dirección a las Illes du Riou: Ille Calseraigne e Ille Jaise. Pasamos entre ellas y tierra, para evitar los primeros coletazos del mistral que ya se está entablando. De hecho, en la zona del “plateau des Chevres”, el fondo disminuye hasta los 9 mts, y aparece un mar de fondo potente, de unos 2 mts, que ya no nos abandonará hasta Marsella.

Pasamos muy cerca de Cap Croissette, para evitarnos rodeos, y nos metemos en la rade d’Endourne para poner rumbo directo a Marsella. Dejamos a babor las Illes du Friol, que visitaremos más adelante para reconocer una pequeña parte de su interesante historia: a lo largo de los años han alojado desde leproserías, hospitales, prisiones... De hecho, han sido inspiración de numerosas novelas famosas.

Primeras vistas de Marsella:





Iles du Frioul




Justo antes de la entrada al Vieux Port de Marsella, dejamos a nuestro estribor el dique y la playa “des catalans”, en memoria a los pescadores del norte de cataluña que venían a refugiarse a esta playa.





Ya dentro del Vieux Port intentamos dirigirnos a alguna de las dos compañías que gestionan los distintos pantalanes flotantes del puerto con posibilidad de amarre para transeúntes: Intentamos primero la ubicada más en el interior del puerto (SNM – Societé Nautique Marseille). Amarramos en un lugar disponible, pero no vemos rastro de nadie, ni creemos poder quedarnos en este amarre (nuestros vecinos son dos regateros de 15 mts y 18 mts).

Salimos de nuevo en dirección a los amarres del CNTL (Centre Nautique du Lacidon), y aquí sí, divisamos su pantalán de “Accueil”. Tenemos ya un viento potente -unos 25 kn- por el través, y la maniobra de atraque require que la almiranta muestre sus dotes de jabata saltando al pantalán flotante con las dos amarras en la mano. Lo hace perfecto, como siempre. Al poco de amarrar, viene a recibirnos un marinero amable que nos acompaña a capitanía. Nos asignan un amarre en el interior del puerto, y nos recomiendan realizar la entrada de popa. Viendo el espacio entre pantalanes comprendo la recomendación.
Éste será el puerto más barato de cuantos hemos estado: 14 € la noche. Agua, luz, y servicios correctos, en el corazón de Marsella. Podemos pedir más?

Para colmo, durante nuestra estancia descubrimos que muy cerca de nuestros pantalanes tenemos todo tipo de tiendas náuticas y alguna librería náutica en la que pasamos algunas horas comprando “incunables” (lectores empedernidos, abstenerse, so pena de dejar la visa temblando).