MAR MENOR / Ordenan retirar 400 barcos fondeados en las playas

[windi]

SAN JAVIER / Ordenan retirar 400 barcos fondeados en las playas en diez días o serán multados

Un bando de la alcaldesa establece sanciones que pueden alcanzar los 123.400 euros

No es el horizonte, ni unas aguas claras y despejadas lo que uno ve, desde hace décadas, al acercarse a algunas de las playas del Mar Menor, sino una flota de barcos, la mayoría de recreo, fondeados libremente y sin control en plena zona de baño. No sólo afean la playa e impiden bañarse a los turistas, sino que contaminan las aguas.

La infracción -consentida durante los últimos años- sólo lleva aparejada ventajas para los propietarios, que se ahorran el coste de un punto de amarre. El Ayuntamiento de San Javier ha decidido poner fin a lo que los vecinos han denunciado como un abuso en numerosas ocasiones. Un bando de la alcaldesa, Pepa García, del PSOE, ordena retirar los barcos de las zonas de baño, es decir, de los primeros 200 metros de mar, y fija sanciones por incumplimiento de hasta 120.203 euros, conforme establece la Ley de Costas.

Se basa asimismo en esta normativa nacional para «prohibir la navegación, fondeo, amarre y utilización de embarcaciones y artefactos a vela o motor en las zonas de baño balizadas». Recuerda que «en los tramos de costa no balizados se entenderá que la zona de baño ocupa una franja de mar contigua a la costa de una anchura de 200 metros en las playas y 50 metros en el resto de la costa».

Prohíbe además cualquier tipo de vertido de las embarcaciones. Concede a los propietarios de embarcaciones 10 días para cumplir las indicaciones del bando.

«Los barcos se han comido ya dos playas completas de La Ribera con una negligencia total, y este bando es un toque de alerta», explica la regidora. Asegura que "seremos flexibles al aplicar la Ley, pero hay que recordar que tenemos más de 400 barcos en aparcamiento libre». El Ayuntamiento ha solicitado al Ministerio de Medio Ambiente permiso y financiación para construir un embarcadero desmontable en la costa del Atalayón y una marina seca, con el fin de despejar la laguna de barcos poco utilizados. «Nadie ha dicho nada en 30 años y hay tres o cuatro muertos por barco en los fondos del Mar Menor», explica la alcaldesa.

Malos usos

La saturación de barcos en la laguna es un fenómeno que ha crecido en los últimos años, por el aumento del parque móvil acuático, la proliferación de puertos deportivos y la moda de las lanchas y motos de agua. La casi nula vigilancia en el Mar Menor ha favorecido, al mismo tiempo, los malos usos desde las embarcaciones, como denuncian con frecuencia la Policía Local e incluso algunos usuarios que navegan en la laguna, indignados ante la elevada velocidad de las motos de agua o la costumbre de vaciar las sentinas y depósitos de aceite en el mar.

Si bien es cierto que en los puertos deportivos cercanos, la demanda de puntos de amarre ha provocado listas de espera y precios millonarios de los atraques, también lo es que el Mar Menor es un mar limitado que no puede acoger dársenas y barcos sin fin.