![]() |
|
|
|
| VHF: Canal 77 |    | ![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
|
#1
|
||||
|
||||
|
.
. . Disfruto a rabiar cada hora del día, Me divierto con los peces voladores, me entusiasmo con los delfines, me estremezco al ver las aletas de grandes tiburones pasar lejos cortando la estela. Vuelo con las gaviotas que revolotean encima del barco, graznando y zambulléndose en el mar. Por las noches gozo con el incomparable terciopelo del firmamento, desde donde penden titilando, mis eternas compañeras: las estrellas. Voy, como desde mi infancia al encuentro de la Cruz del Sur. . . . Muchos interrogantes. Ninguna respuesta certera. Solo que allí en la plenitud del océano mi corazón, estaba acompasado en armonía con el Todo. En la noche estrellada y amable, "Desaforado" vuelve a sus raíces llevándome de regreso a las mías. Ebrio de serenidad, me voy a descansar. Falta poco para el amanecer. ¡¡¡ BROOOMMMMMMM..... CRAAAAAAASSSSSSSHHHHHHHHHHHH, CCCCCRAAAAAAAAAKKKKKKKKKK, GLUUUUUUUU !!!! Escucho ruidos tremendos, y una mano inmensa me estrella contra la banda de babor. Trato de recuperar instintivamente el equilibrio y pienso"¡ Choqué con otro barco !!!". La luz gris del alba es insuficiente, y choco con todo en la cabina. El barco está inundándose. El agua entra a raudales. Huelo un repugnante olor a ballenas. Y salgo atropellándome a la timonera. A 20 metros de mi barco herido, dos enormes cachalotes asoman sus moles fuera de las olas, respirando. ¡¡¡¡ Ballenas, la reputísima madre que las parió !!!! Pánico, rabia, desesperación. Todo al mismo tiempo. Me largo a llorar como loco. Vuelvo al interior del barco. En ese momento veo que la bomba de achique esta salvándome la vida. Me desplazo hasta la proa, arrío el velamen, y vuelvo a entrar en la cabina. No puedo creer lo que estoy viendo. En el tercio de proa hay un enorme boquete de unos 80 centímetros de diámetro bajo la línea de flotación Por allí, el Indico se cuela a cada metro que avanzamos.. Entorpecido, intento taponar el rumbo incrustándole un almohadón y un par de bolsas de velas, haciendo palanca con un remo. El flujo que ingresa dificulta mi empresa. Vuelvo a insistir, logrando detener algo el agua con unas maderas y trapos. El agua me llega a las rodillas, el casco se mueve como un boxeador groggy. Desorientado vuelvo al exterior, los cachalotes han desaparecido. Miro la balsa salvavidas, y no se que hacer. Nuevamente me asalta el pánico. Pero me sobrepongo y trato de cerrar el rumbo desde afuera -tal como lo leí en algún libro- echando un tormentín y cazándolo muy fuerte por las bordas, para que la presión del agua lo embutiera hacia dentro. Después, me pongo a achicar el agua del casco con un balde, ayudando a la bomba. Al poco tiempo quedo extenuado. "Por suerte, al menos hay algo de luz". -recuerdo que pensé en mi desesperación-. No se que hubiera ocurrido si el incidente se hubiera producido en total oscuridad, estamos inclinados hacia proa y el peso del agua en esa sección del barco debía ser mas de una tonelada. . . . Después de esos primeros momentos, intenté establecer mi posición. Estaba a 920 millas de la tierra mas próxima. Y nuevamente me acomete el pánico. Lloro desconsoladamente, tumbado sobre mi cama mojada. La bronca y la impotencia se adueñaban de mi. Me acometió una brutal depresión, llena de imágenes de cuanto naufragio recordaba o conocía. hasta llegue a pensar que quienes habían intentado disuadirme de esa existencia errante tenían razón.. . . . Intento establecer una estrategia para salvarnos... Pero la razón me dice que estamos a 920 millas de cualquier auxilio, y vuelvo a caer en la desesperación. Peor todavía, cuando empiezo a percibir los crujidos que emitían las rajaduras del rumbo que se difunden por todo el interior de modo ominoso. . . . Al cerrarse la noche, mi estado es de tal indefensión que hasta siento vergüenza de de intentar oraciones pidiendo ayuda. Me pareció hipócrita ponerme a rezar, cuando nunca lo había hecho antes. Poco a poco me fui resignando a mi suerte. Y con una sonrisa irónica me repito a mí mismo que lo "único que un hombre necesita para morir es estar vivo". ... Bueno, pues hace algunos días, estando en Argentina, me apeteció visitar la muy recomendada librería "El Pulpo Negro". Me encontré como un niño en una tienda de golosinas. Que delicia. Hay librerías mas grandes, las hay mas modernas, con mas libros... pero "El pulpo negro" tiene un encanto especial. Y entre tantas golosinas, encontré una en forma de librito, muy pequeño en forma, pero muy grande en contenido, que tiene como titulo "Un Vagabundo del Mar" cuyo autor, Nicolás Paura, comparte sus 20 años en el mar. Un libro exquisito, delicioso, donde se mezclan emociones, sentimientos, pensamientos, poesía, desesperación, aventuras, tragedia, alegrías... Si, tal vez he sido un poco tramposo y he compartido con vosotros una parte un poco trágica, impactante, para llamar la atención. Pero el libro no tiene desperdicio. Lo recomiendo. Estos Argentinos... Que buenos son transmitiendo... Saludos y rondas CRUSOE
__________________
http://latabernadelpuerto.com/foro/v...ic.php?t=43721 |
|
|
Discusiones similares
|
||||
| Discusión | Iniciada por | Foro | Respuestas | Último mensaje |
| Sirenas o ballenas? | terranova | Foro Náutico Deportivo | 5 | 28-11-2007 21:55 |
| Avistamiento de delfines y ballenas | MAIK | Foro Náutico Deportivo | 4 | 29-08-2007 14:32 |
| La vigilia de las ballenas | Wandyta | Foro Náutico Deportivo | 16 | 27-05-2007 19:27 |
| Buceando con ballenas y sigue viva... | Vientoceano | Foro Náutico Deportivo | 11 | 14-01-2007 20:09 |
| El word y la madre que lo parió | Tabernero | Informática e Internet | 3 | 15-11-2006 13:01 |