
En Essaouira pasamos tres días muy interesantes, ya que el puerto está en la misma entrada de la medina que es una joya y con mucho sabor.
El puerto es pesquero y sólo habían un velero de un francés residente allí que lo charteaba, o sea, que teniamos que sacar el barco dos veces al día cuando hacía sus saludad y otras dos cuando regresa. Aún con esta molestia, merecio la pena sobradamente.
A cambio de unas cervezas, un joven marroquí, que aún hoy no se para quien trabajaba, si para la policia, para la Capitania de Puerto, para la Policia Real o para nosotros o para todos, conseguía todo lo que necesitabamos, hasta que la policia nos visase los pasaportes en domingo por la tarde cuando estaban "cerrados".
También pudimos ver en persona a las famosas cabras que comen las hojas tiernas del Argan, para lo que se suben a los árboles y andan por las ramas como si de equilibristas se tratase. Tengo fotos de estos simpáticos y originales animales pero no recuerdo como se suben. Si alguien se ofrece se las puedo enviar para que lo haga en mi nombre.
Nos embriagamos de comida marroquí, diferentes tajines, cous cus, y sus maravillosas verduras y ensaladas y bebiamos vinos y en todas las comida sin ningún problema.
A los tres días partimos al próximo puerto, Safi. Este relato queda para la próxima. Para que no se me plvide, otra cosa buenísima es que el gasoil está a unos 75 céntimos!!! una maravilla.

