Lijar a máquina pequeñas superficies de madera no es una tarea complicada y volverla a barnizar menos todavía.
El tema polvo queda muy minimizado si se emplea una pulidora con bolsa y si con un trapo húmedo de disolvente se van dando pasadas a la superficie que se lija justo antes de aplicar la lija.
En caso de tratarse de una madera irrecuperable por aspecto, a mí criterio mil veces antes un buen lacado en color que contraste y combine con el resto que una pegatina imitando madera, todo ello sin olvidar que hay vinilos muy correctos y otros muy cutres.
Saludos
