Resultado charla quedada/cena Barcelona/Sitges

[Bitxo]

Instantes:

Hace frío, el viento de proa hace que lágrimas asomen a mis ojos y se desborden por el párpado , atravesando la sien hasta alcanzar el pelo, que las bebe… El día es gris, llevamos el traje de aguas y ropa interior térmica, y forro polar, y aún así, abrazada a tu espalda, siento como te palpita el corazón, remontando las olas para evitar pantocazos… Tu espalda me defiende del frío, yo, pegada a ti, te cubro las espaldas… y así compartimos el instante, este instante, y el siguiente, y ojalá muchos más… y Bonita parece feliz pese a la meteorología, y se inclina coqueta al ritmo de melodías cadenciosas y nubladas…

Nuestro gaditano del alma nos ha conseguido un “bis” de postres con porción especial de crema catalana…. ¡¡Si es que su salero y su siempre feliz sonrisa ablandan y conquistan a cualquiera!!... y entre risas y miradas cómplices las féminas (Freeblue, Grimerx y yo) nos lanzamos a devorar la piña, rebañando con ella la crema, cargamentos de calorías que ojalá se conviertan mañana en fuerza para repicar con más ímpetu y salero… mientras recordamos las aventuras del verano, las navegaciones nocturnas, las varadas involuntarias y demás experiencias saladas… (Y para que conste: he votado tu cuscús, me deberás jamónjamón si ganas)

Poco a poco, minuto a minuto, conseguimos alcanzaros, desde lejos parecíais una patera, ahora, de cerca, os habeis convertido en un velero repleto de felicidad… y os vamos reconociendo en la cubierta del velero… Las sonrisas se ensanchan, se alzan las manos para saludarnos uno a uno, nos preguntamos ¿qué tal?, sentimos la alegría de conocernos y reconocernos de nuevo, cómplices en esta pasión, felices en esta misma mar que nos ampara… Rom hace fotos desde el Caps III, Panxut desde el Bonita, Princesa Bacana y Sindbad, y Edda y Ja, e Isabel, y Magicus y su mujer (vaya, tanto nombre tanto nombre….), y todos sonreís y charlais y disfrutais… ¡¡qué poco hace falta a veces!!... Acabamos de navegar al lado de Oceanis44 y su tripulación, comentando la jugada, ahora a vuestro lado, hace unas horas salíamos de puerto con la tripulación del Mangudo... y nos adelantamos y rezagamos para saludarnos todos, poco a poco, milla a milla, barco a barco….

Me he tumbado en la proa para ahuyentar el temblor que me habita mientras Panxut y Quim hacen guardia junto a Sisparr. Me siento, como siempre, en la mejor de las compañías... Oigo como la proa se clava y separa la mar, el agua lamiendo el casco a mis costados, fría e indiferente… y recuerdo las guardias durante la travesía desde Croacia, y la fatigada felicidad al hacer el cambio y deslizarse entre las mantas para descansar… aquel instante justo antes de caer rendida, imágenes del día bajo los pesados párpados, el distinto ritmo de los días y las noches, la sensación de no querer dormir para no desaprovechar ningún instante, y una fatiga de siglos que te obliga a permanecer en horizontal para darles un descanso a los ojos, a los músculos, al corazón. Oigo voces desde la bañera, hay que hacer un bordo ,el génova que cambia de banda con un roce ruidoso sobre la cubierta, y ahora ha cambiado también la inclinación del velero, del cuerpo, muevo los cansados músculos para contrarestar la escora y poder dormir sin sobresaltos…

Estamos en el muelle de espera de Sitges, abarlodos ya, y esperando a los demás tabernarios que van entrando por la bocana, ayudándonos a amarrar, y mientras tanto saludando a los que van llegando, intercambiando frases y buen humor, presentando a los nuevos y abrazando a los ya conocidos… Como siempre ha habido duendes con nombre, siempre sonrientes, siempre cálidos que han organizado y pensado en todo para que nos sintamos a gusto, como en casa, como en nuestro puerto …
Al día siguiente, de nuevo casi todos en el muelle, ayudándonos a soltar amarras, demorándonos esta vez en la despedida, porque todos quisiéramos ser más dueños de nuestro tiempo, poder alargar las horas, hacerlas eternas, conversar más tiempo…
Una familia grande, enorme, y valiosa, políglota, de múltiples facetas, multicolor, trapera y tractorista, y siempre nueva, siempre cálida…

Y van pasando las diapositivas, y veo paisajes lejanos y calas de ensueño y parajes aún desconocidos que quisiera conquistar yo también para que habiten mis ojos y mi mente. Cómo envidio a aquellos que han sabido soltar amarras, y cómo me alegro con ellos de lo vivido y cómo disfruto con ellos lo que para mí es un mundo aún por descubrir, para ellos un recuerdo vivo que ya nos les abandonará … Siento admiración y agradecimiento, la admiración de quien quisiera encontrar pronto la posibilidad y la valentía de lanzarse, y el agradecimiento a quien me hace soñar y luchar por convertir el sueño en realidad algún día…

Son sólo instantes de un fin de semana, unos pocos instantes entre muchos… que evocan otras quedadas, otras cenas, y que auguran nuevos encuentros…

De nuevo: gracias por poblar nuestras mentes con buenos recuerdos