¿Os acordáis de Mat?. Es ese chico del que hablamos en este hilo en abril del año pasado, que pretendía cruzar el Atlántico en un velero de un metro de eslora:
Más que un barco parece un tentetieso, con más manga que eslora y con una orza profundísima y unos depósitos amarrados a los lados que aumentan su estabilidad.
Lo bautizó "Undaunted" ("Impávido") y esta es su dibufirma:
Inició la intentona desde La Gomera para llegar a Florida en abril de 2017, pero volvió a tierra a las pocas horas de salir de puerto por un problema con los timones que no habían detectado en las pruebas de mar. Además el barco de un espectador colisionó con él, y aunque no hubo daños mayores (el barco es de aluminuio) hizo temer por su integridad en el recorrido. A ello se juntó que los trámites aduaneros se habían prolongado mucho y la salida se había atrasado, lo que no garantizaba que alcanzase el otro extremo del Océano antes del pico de actividad de los huracanes, que es a finales del verano.
Con todos estos ingredientes Matt decidió volver a EEUU e intentarlo de nuevo en otoño. Dejó el barco empaquetado en La Gomera y en diciembre de 2017 volvió para volver a intentarlo:
https://littleboatproject.org/
Bueno, pues tampoco esta vez ha conseguido salir de puerto, aunque ahora ha sido por trabas administrativas. Al parecer el mismo día que pensaba salir se le acercó la autoridad portuaria con una lista de requerimientos que, según Mat, le dijeron que exigen siempre a los barcos pequeños. Entre ellos se incluía un seguro de al menos 300.000 € y una carta de los guadacostas de EEUU certificando que el barquito ha sido despachado para la travesía que pretendía iniciar. Al carecer de ambos, no le permitieron abandonar el puerto ni siquiera para hacer pruebas de estabildad o de navegación. Mat afirma que ninguno de esos requisitos se los especificaron en su anterior intento en abril.
Ante estas dificultades Mat se ha vuelto a EEUU, el Undaunted sigue empaquetado en La Gomera y el proyecto se pospone sine die.